Tras
años viviendo en grandes ciudades como Barcelona y Madrid, David Cobas (su
nombre real) decidió volver a su Galicia natal, y es allí donde se fraguan
estos versos en los que se percibe un punto de inflexión tras años de frenética
actividad musical compartida.
Una
reflexión con la mirada puesta en los recuerdos y lugares de la infancia y sus
sensaciones, con cierto desapego descriptivo con el que parece… más que
recrearse en dicho pasado, querer buscar
señales para afrontar un futuro, tanto artístico como personal.
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