Apenas cuatro canciones lanzadas en un par de singles de vinilo por el dúo que forman la granadina Imar Amar y la sevillana Ana Valladares no impidieron que agotaran las entradas en su segunda actuación en la capital, tercera fuera de Andalucía y primera como únicas protagonistas como ellas mismas nos recordaron al inicio de la actuación.
Quizás fue esa la mejor manera de despojarse de una responsabilidad impuesta a este proyecto que, aunque balbuceante, está generando máximas expectativas entre los seguidores del pop vintage y a la vez contemporáneo. Seguidores difíciles de etiquetar por lo dispar de edades y atuendos allí vistos.
Una canónica discoteca ochentera en horario del medio día, más las circunstancias sanitarias a las que desgraciadamente estamos acostumbrándonos, más la minimalista puesta en escena, ellas con sus guitarras y un sintetizador provocaron un comienzo algo desangelado, en el que los medios tiempos con el teclado protagonista en las bonita nana pop “Doce navajas”, la lorquiana “Luna plateada” (anunciada como próximo lanzamiento) o la íntima “Sol de ayer”, no acabaron de brillar ante un ambiente frío.
Si lo consiguieron cuando la caja de ritmos soltaba su artillería de sonidos tonadilleros y populares de forma acelerada, desatándose con desparpajo en “La Fuente” y “Mentiras” canción esta última que rompiendo el hilo presentaron animosamente preguntando al público sobre la conveniencia de su título pues también es conocida como “Hemos sido”… y es que a pesar de su poca experiencia escénica, se las veía cómodas y seguras de sus canciones y así , con naturalidad y poniendo de su parte templaron el ambiente con alguna nueva canción ¿aún sin nombre? ¡Tres veces ensayadas y al directo¡ dijeron, a la que se refirieron como Las Grecas, aunque recordara también a Almodovar y McNamara.
Habían enganchado pero era tiempo de acabar y lo hicieron con los ritmos chispeantes de su primer pequeño clásico “Charlotte” para revivir la luminosa voz de Jeanette. Sorpresa final en forma de enérgica y alegre versión. “Hay que vivir la vida” del dúo de hermanas colombianas Elia y Elizabeth que entre 1971 y 1973 garbaron un par de discos que recuperó en 2014 Munster Records en su serie Vampisoul y que además posteriormente se popularizaran sonaron en un capítulo de la serie Narcos. Breve y buena actuación para seguir creciendo… sin prisas.
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