El tercer día del festival empieza a pasar factura. por lo que toca
dosificar. Dejamos los multitudinarios conciertos de Amraral e Izal y empezamos
con León Benavente que repiten tras su estreno el pasado año y crecen en
público con a penas un Ep como novedad "Avanzan las negociaciones"
como nuevo material. Desbordante sonido con Abraham Boba al frente del teclado
dirigiendo una colección ya conocida que se mueve desde el de pop más vigoroso
"Ánimo valiente" hasta el ruido mas ardiente "Ser brigada"
que cerró la actuación con la banda auténticamente desatada y la colaboración
de Cristina Martínez del Columpio Asesino. Fuerza y sensibilidad en una
brillante ejecución.
Una de las pocas actuaciones internacionales fue la de Reptile Youth,
banda danesa de rock bailable. Desconocidos para la mayoría movieron al
personal, primero por su propuesta de potentes guitarras y ritmos abrasivos...
después cuando esta propuesta se agotó, la fiesta continuó con la enérgica
actuación de su cantante y director de orquesta Mads Damsgaard, proponiendo un
despliegue corporal y de baile un tanto manierista... y excesivo que también se
agotó.
El dúo formado por Nita y Alejandro, Fuel Fandango ha ido creciendo
en el festival desde escenarios menores hasta cerrar el escenario principal.
Difícil papeleta solventada gracias a su coctelera sónica para todo los
públicos: electrónica flamenca y funky arrabalero con las que agotar las
energías de la multitud.
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