11 agosto 2025

LOBOS NEGROS (9-8-25) Centro de Humanidades (La Cabrera – Madrid). Publicado en la web Ruta 66

“El Rock and Roll tiene razones que la razón no entiende” se podía leer escrito a mano sobre una cartulina pegada en uno de los monitor de sonido. Aforismo que bien se podría aplicar a esta incombustible banda con cuarenta años de ininterrumpida trayectoria. ¿El secreto? Creen en lo que hacen al margen de estilos y modas, afrontando el futuro con entusiasmo y mirando con el rabillo del ojo su pasado, mientras honran en cada uno de sus conciertos a los grandes del rock and roll…

 
 …como hicieron en calurosa tarde de agosto en la madrileña Sierra de La Cabrera, presentando en el Salón de Actos de esta tranquila localidad,  La Ruta de la Plata, disco publicada el pasado año por ellos mismos. El decimoséptimo trabajo de los de Talavera cuyas canciones, aunque abrieron con «Carretera Asesina» un instrumental que apreció en su estreno discográfico en el lejano años 1987, ocuparon la primera parte de la actuación: «Maracas y Pistolas» con un ritmo  muy Clash, el oscuro clasicismo rocker de «El Ataque del lobo» que destetó algún que otro aullido entre el público y el taimado medio tiempo «Eres tú». 

Foto: Ángel (Lobos Grises)
Después «El hombre atormentado» una lograda y vacilona adaptación del Ice Cream Man de Tom Waits y un poco de de trahs-roll con «Wipe Out» y «Go Go Cra
mps» con el kit de batería básico adelantado en el escenario y Ricardo Vintanen percutiendo sus baquetas por todas partes, incluido el caso de motorista vintage que se había puesto Luís “Lobo Negro” Martín, el dicharachero y pedagógico alma de la banda, que entre canciones no paró de contar anécdotas, recordar influencias musicales y cinematográficas, además de comentar las canciones, pues entre el heterogéneo público, aunque se encontraban fieles seguidores, la mayoría lo formaba aficionados con sana curiosidad por una propuesta a la que se acercaban por primera vez.
 
Luis Lobo Negro que adapta su amplio repertorio según tipo de público, planteó la segundo parte de la actuación a base de versiones «La banda Viajera (John Fogerty)» su adaptación del Travellin’ Band de la Credence Clearwate Revival entre alguna otra canción propia, la muy “motown” «Tan solo quiero una oportunidad» (ambas también del último disco) o «Bloody Mary Comanche» que sonó con mucho swing entre aires latinos. Después versiones clásicas más reconocibles pero menos interesantes: «Stand by me», «This boot are made of walkin'» de Nancy Sinatra, «El Rock del a Cárcel» o el «Wolle Wolle» como fin de un didáctico recorrido por los sonidos más negros del rock, blues, góspel… ¡o lo que al trío se le ocurra!

06 agosto 2025

CAR SEAT HEADREST - The Scholars (Matador/Popstock!). Publicado en el nº 438 de la revista Ruta 66.

Tras parón provocado por larga convalecencia postpandémca -solo la publicación del directo Faces for the Masquarade (Matador 2022) le ha mantenido en el foco- Will Barnes aka Will Toledo regresa con un trabajo que continúa alejándose de su anterior obra, dominada por el sonido folk instrumentado en baja fidelidad. ¡Dónde quedan ya aquellas grabaciones caseras que llamaron la atención de su actual discográfica! Ahora, el virginiano asentado en Seattle, crea una auténtica ópera rock de hora y diez minutos de duración, con varias piezas que superan los diez
«Gethsemane» incuso los dieciocho «Planet Desperation»… con entidad propia para justificar el disco.  
 
Una narrativa sonora de frenético sube y baja inspirada en un ficcionado poemario, el del Arzobispo Guillermo Guadalupe de Toledo, que habla de la crisis espiritual y dudas existenciales de los eruditos que  protagonizan las diferentes canciones en el contexto de un imaginario parnaso universitario. Un desbordante ingenio de lujuria instrumental plagado de referencias culturales y que musicalmente bebe de Tommy «Equals» o Ziggy Stardust «Reality» y en el que el artista, más que nunca, se apoya en el resto de la banda, no solo en el aspecto instrumental: persucientes, teclados, sintetizadores y todo tipo de guitarras, sino en el proceso compositivo de esta grandilocuente obra que… del tirón exige, aunque incluye reposados y necesarios anclajes acústicos «Lady Gay Approximately» en este disfrutable y engalanado libro sonoro.

05 agosto 2025

DEERHOOF - Noble And Godlike In Ruin (Joyful Noise/Popstock!). Publicado en el nº 438 de la revista Ruta 66.

La veterana, reconocible e inconfundible banda de San Francisco, presenta una nueva y divertida locura ruidista ¡y van ya…! Ritmos sincopados servidos de forma frenética entre acelerones, cambios de ritmo y giros instrumentales abruptos e inesperados. Se cuelan además algunas melodías retro-tropicalistas «Kingtoe» y electro-latinas «Disobedience». Un ejercicio de pop poliédrico deconstruido en planos sonoros que se derriban y vuelven a construir entre experimentos electroacústicos «... Of The Fire Trick Star» con la voz que aporta la japonesa Satomi Matsuzaki utilizada como un instrumento más, entre recitados y fraseos de jazz bastardo «Who Do You Root For». Un reciclaje sonoro de sincopadas estructuras instrumentales «Ha, Ha Ha, Ha, Haaa» y disonante zumbido eléctrico «Sparrow Sparrow» que pretende, en palabras de sus protagonistas aportar esperanza a las personas que se sienten deshumanizadas al no sentirse incluidas en marcados sistemas de valores: género, creencias, nacionalidad…

04 agosto 2025

LAEL NEALE - Altogether Stranger (Sub Pop/Popstock!). Publicado en el nº 438 de la revista Ruta 66.

En su cuarta referencia, Lael muestra sus inquietudes respecto a la identidad territorial-emocional a través del espacio campo-ciudad. Ella nació en una granja en la campiña virginiana, pero reside en Los Angeles, a la que ha regresado tras un tiempo viviendo en otros entornos rurales. Musicalmente, la dual pertenencia se refleja a lo largo de los escasos treinta y dos minutos, en forma de guitarreo minimalista
«Wild Waters», country marciano «All Good Things Will Come To Pass» y narrativa velvetiana «Tell Me How Yo Be Here». Lo hace de forma artesanal con un curioso repertorio de sintetizadores de época e instrumentos vintage –monocordio, mellotrón…- sobre el que se alza su peculiar y atimbrada voz «Come on», para crear evocadores ambientes retro-futuristas «All Good Things Will Come To Pass». Tecnología casera con la que genera bucles continuos que provocan  un sonido corpóreo y a la vez expansivo «Down on the Freeway», en atractivo contrapunto entre lo naif y operístico «New Eyes».

03 agosto 2025

ROCKLAND ART FEST - Santo Domnigo de la Calzada (20-7-25). The Black Keys - Fantastic Negrito - Marcus King - Warmduscher - Girlband!

The Black Keys. Foto: RockLand Fet
 
La última jornada, en domingo, se presentaba más ligera en su programación en cuanto a actuaciones, pero igual de interesante. Abrieron Girlband!, joven trío de Nottingham que en su primera visita a España y a pleno sol irradiaron vitalidad con sus efervescentes y pegadizos himnos de pop guitarrero alternativo con “Not Like The Rest” como destacado ejemplo junto a los coreables "na na na naaaaas" de “21th Century Suffragette” y versión de T-Rex incluida. Una extraña mezcla de glamur y hooliganismo que funcionó muy bien, reforzada con una voz muy personal y una natural actitud amateur bien llevada, salvo en los momentos en los que en plan estrella sientan al público para levantarlo con es estribillo (muy british). Sin salir de las islas, pero lejos de los sonidos citados, llegó el turno para los londinenses Warmduscher, que ofrecieron una dosis de electro-postpunk con los sintetizadores como base aunque no se olivaron de las guitarras. Hubo también momentos en los que se impusieron los ritmos sincopados y bailables con la voz en recitada homilía. Inclasificables en su ruidosa propuesta, aunque cercanos a bandas como Fat White Family, les hubiera sido más propicio un horario de noche… noche. 
 
Marcus King cuya actuación en Madrid tres días ya se comentó en esta web, ajustado lógicamente a horario festivalero, condenso su orgiástico desenfreno guitarrero mostrando de nuevo su maestría con el legado coutnry-rock clásico… el de los Allman Brothers como principal referencia, pero no se quedó solo ahí, pues se lució también, sobre todo en la voz, en su cancionero más pausado y acústico, moviéndose por las sendas del blues añejo, y el soul menos ortodoxo, bien acompañado por una engrasada y muy solvente banda, que aportó mucho más que los efectistas y electrizantes duelos de guitarra. Con Fantastic Negrito llegó el funky-blues bailable y el colorido instrumental. Carismático y teatral en el escenario, solo con su imagen ya impactó, ofreció una variada  actuación donde no faltaron dosis de rock glamuroso que en algunos momentos remitía directamente a Prince, aunque se alejó de su legendaria sombra adentrándose por las sendas del rithmanblues negroide con algún estallido rockero. No llegó a una hora de acutación y tampoco le hubiera venido mal algo más de nocturnidad.
 
Cierre por todo lo alto con The Black Keys que comenzaron con Dan Auerbach y Patrick Carney solos en el escenario, mostrando sus orígenes como dúo de guitarra batería… que lo siguen siendo como tal, aunque en directo hace ya tipo que funcionan como una banda, en esta actuación con cuatro miembro más, destacando sobre todo percusiones y teclados que aportaron colorido al electrificado blues rock que sonó… ¡con mucha distorsión y crudeza!. Repasaron canciones repartidas por buena parte de su discografía, incluso las poco valoradas en su día “Fever” y “Wave of Love” del incomprendido y controvertido Turn Blues disco con el que en su día, descolocaron al personal tras el exitazo comercial de El Camino que en todo caso y como es lógico se llevó las mayores ovaciones en sus tres aportaciones: la tempranera "Gold On The Ceiling¨ y el esperado bis para delirio y disfrute del público en masa, con las excitantes y bailables ¨Little Black Submarines¨ y ¨Lonely Boy¨que sonaron arrolladoras, aunque antes ya habían avisado de nuevo de donde vienen con un retorcido “On The Road Again” de los Canned Heat. Perfecto broche final a un gran fin de semana.

02 agosto 2025

ROCKLAND ART FEST - Santo Domnigo de la Calzada (19-7-25). Iggy Pop - Wolfmother - Kira Mac -The K's - Morgan - Delirium Trremems - Flying Rebollos - Kokein - Tobogán

Iggy Pop. Foto: luiscarbxnell
 
La segunda jornada parecía programada para atender al máximo reclamo de la semana, la sombra de la icónica Iguana” es alargada y la espera hasta que llegara bien entrada la noche, se hizo placida entre diferentes propuestas de a priori impacto menor, pero que fueron preparando al público para una noche de aúpa. Abrieron como acertada propuesta local los riojanos Tobogán que reunieron aún con bastante sol a bastantes seguidores, convenciendo con su una buena descarga de rock punkarra. A continuación y tras reajuste horario tras caerse del cartel Deadletter por percance familiar de uno de sus miembros, se colaron a última hora Kokein que con su propuesta stoner dio paso a más bandas de Esukadi como en la jornada anterior, solventando con ánimo y buen hacer la ardiente tarde en busca de la línea de sombra. Primero con Flying Rebollos banda de culto que no tuvo la atención merecida en los 90’ y que en su regreso defendieron con orgullo su clásicos himnos de rock clásico, tabernario,  rithmanblusero y vacilón en castellano, onda Burning… junto a alguna canción nueva a la altura de sus particulares clásicos.  Después otros que están de regreso, los legendarios Delirium Tremens que en euskera emocionaron a los que siguieron su corta trayectoria iniciada en los postreros 80’ y sorprendieron a los que no, con un repertorio plagado de edificantes canciones en las que la melodía y la  potencia se fundieron en uno. Muy buena actuación con un sobrio dominio de los instrumentos. 
 
A media tarde llegaron las propuestas más controvertidas del día, no por calidad de su música, sino por la vocación rockera… o no tanto, que a priori “proclama” este evento. The K’s, mostraron su perfil más reconociblemente british con sus virtudes: buenas melodías de enérgicas guitarras pop, y sus defectos, sobre todo en su actitud estética, algo condescendiente, pero también sonaron a electrizante rock alternativo y en horario de tarde ya templada, gustaron a quien se mueva en los márgenes y a quienes se dejan llevar con criterio  por otras propuestas en las que la canción van más allá del estilo, y estos tipos aportaron una cuantas defendieron meritoriamente. Algo similar, aunque con una propuesta totalmente diferente, se puede aplicar a Morgan, y es que los madrileños tanto pueden encajar en un festival como en ninguno, saliendo indemnes siempre que el horario acompañe, como fue el caso, pues en el ocaso del día ofrecieron otra solida muestra de su atemporal y reposado cancionero pop-folk que en la voz de Nina de Juan, crece sobre todo en las canciones en castellano. Abarrotaron el segundo escenario.
 
Llegó el momento más esperado con Iggy Pop como no, que a sus años, ya ronda los 80, y con  una cojera crónica que limita sus movimientos, ofreció mucho más que la exigible actitud. La voz, sin ser la que era, aguanta la exigencia de unas canciones que se retuercen crudas como su figura pellejuda y fibrosa. Apoyado en una banda de guitarras crudísimas, potentes y oscuras junto a contundentes y machacones ritmos de batería, repasó de forma equitativa  material de su carrera en solitario con el imprescindible y salvaje repertorio de los Stooges, sonó todo lo que tenía que sonar menos curiosamente “Fun House” que la noche anterior versionaron… ni por asomo con la misma actitud los Pistols. Sonó más punk que el punk y más sucio que todo el garaje rock junto se mostró creíble adaptando su característica teatralidad a sus limitadas posibilidades, pero se le veía reírse y divertirse. Creía en lo que estaba haciendo y lo transmitió. No se cortó en chapurrear en castellano proclamas para animar ¡más aún! al enfervorecido público… y poco más que decir. ¿El repertorio? por ahí están los listados, más o menos el de siempre, ¡que va a tocar a estas alturas! Brutal actuación de un artista total e inmortal.
 
Tras la liturgia sonora con el de Detroit, la británica  Kira Mac sabía lo que se jugaba y se esforzó rabiosa y visceral en una actuación en la puso toda su energía y potencia posible en el escenario pero su mezcla entre el metal y un potentísimo hard-rock no acabó de enganchar más que a los más fieles  Eso sí actitud, empeño y empuje no le faltaron, ni a ella ni a su banda le fallaron. Llegó el final con Wolfmother, el trío australiano  sonó atronador, rompiendo el sonido hasta hacer retumbar los aledaños del recinto. Sin concesiones en su furia stoner  hardrockera y psicodelia con su bajista  apisonadora taladrando por encima de las saturadas guitarras… uff!    

01 agosto 2025

ROCKLAND ART FEST - Santo Domnigo de la Calzada (18-7-25). Sex Pistols ft. Frank Carter - Jet - Refused - The War and Treaty - Los Zigarros - Alcalá Norte - Battlesnake - PiiLT - Ciclonautas


Sex Pistols: Foto: RoclkLand Fest

 Sigue creciendo el Rockland Fest, que en esta cuarta edición ha mostrado un cartel que lo sitúa en primera línea de los festivales musicales, no solo rockeros, del país. Su evolución no parece terne límites, aunque sería de agradecer que no cayera en el tentador formato “macro”. De momento mantiene rasgos de evento “humanizo” en tamaño y comodidad: agradable recinto cerca del núcleo de urbano, programación abarcable y sin actuaciones solapadas, cabezas de cartel potentes y variedad de propuestas… quizá demasiado comentaba la gente, pero esto permitió que el público pudiera tener descanso según gustos por un lado, y principalmente que todas las actuaciones gozaran de buena presencia de público, y es que han sido en torno a las 10.000 personal por día los que han asistido según la organización.
 
Desde primera hora de la tarde hubo ya buen ambiente para presenciar las propuestas más cercanas como la de los navarro-argentinos  Ciclonautas y su rock de tintes stoner y melódicos, también el regreso de PiLT generó buena presencia de público con su siempre fiable dosis de melódico y futurista metal industrial. Metal que continúo en su versión friky-teatral de aire épico y un tanto grotesco del septeto australiano Battlesnake. Se hablaba mucho y bien de The War and Treaty y la expectación generada se vio satisfecha con buena presencia de público que colmó sus expectativas con una actuación enérgica de la pareja formada por Michael Trotter Jr y Tanya Trotter que ofreció cuarenta y cinco escasos minutos de soul-gospel, rithmanbluesero  con intenciones country aunque el banjo no sonaba nada en un discretísimo segundo plano, y es que el dúo vino reforzado por una nutrida y excesiva banda, con algunos jovencísimos miembros en modo becario-presencial más que otra cosa. No importó porque tenían munición de sobra tanto en el aspecto vocal y coral, como en los teclados y la sección rítmica de vientos. Primer gran momento del día reivindicación de derechos ciudadanos incluida.
 
Con Refused llegaron los primeros pogos de la jornada con una buena multitud de infatigables seguidores  armando una buena en las filas adelantadas. Gran actuación de los suecos liderado por un reivindicativo Dennis Lyxzén que no cesó en su necesarias proclamas por la situación actual de este mundo. Fueron a más ganándose también al resto del público que vibró con su hardcore-punk enérgico y experimental a ratos, sin olvidarse de las melodías. Se hincharon a vender camisetas y bolsos con el precioso diseño del The Shape Of Punk To Come clásico de su discografía del que se nutrieron a fondo como protagonista de un repertorio brutal en su gira de despedida. Energía que en el mismo escenario principal le faltó a Sex Pistols ft. Frank Carter que sin Johnny Rotten pero con los tres miembros originales restantes no lograron defender su propio legado de imperecederos y excitantes  himnos. La banda más influyente del punk tocó todo lo que tienen que es poco, pero intachable, no hace falta nombrar canciones, pero sonaron como si las tocara cualquier otra banda, a pesar de los esfuerzos del voluntariosos y entregado Frank Carter que hizo lo que pudo y más (se lanzó con ganas a cantar entre el público) sustituyendo al insustituible…. que no aparecía ni siquiera en las imágenes proyectadas de fondo que rememoraban sus tiempos dulces. Ni la versión del “No Fun” de los Stooges ni el “My Way” lograron encender al gentío, salvo a incondicionales entregados a todo. Solo en el cierre con “Anarchy in the UK” con  Dennis Lyxzén, enardecido por su actuación anterior, las cosas parecieron ser como deberían haber sido.
 
Entre ambas actuaciones se intercaló en el segundo escenario el pop guitarrero  alternativo y post-punk de Alcalá Norte uno de los grupos del momento, que congrego a una buena multitud y  que sigue creciendo en escenarios grandes aunque con el repertorio lógicamente limitado por las canciones de su exitoso estreno homónimo, ayudado por algunas nuevas aportaciones como “10K” la versión del “10.000” incluida en el disco homenaje al Super 8 de Los Planetas. Destacable sonido de teclados y voces para una laboriosa actuación en la que no faltó “La Vida Cañón”, su particular y dignísima verbena pop del verano que presentaron con palabras similares quitándose trascendencia. El ese mismo escenario y cambiando radicalmente de propuesta aparecieron  Los Zigarros banda de rock and roll de toda la vida ya consolidada y con un bagaje de canciones y directos bien vertebrados. Intachables como banda, los hermanos Tormo y compañía manejaron el escenario guiando al público son soltura entre estallidos de rock canalla y riff  stoniano, rithmanblues en efectivo medio tiempo y rock juvenil tequilero. Todo ello impecablemente ejecutado, pero parecían ir con el piloto automático. Tienen calidad y oficio para ofrecer algo más y adoptar riesgos, aunque al público pareció bastarle… que no es poco.
 

Cerraron la jornada los australianos Jet que fueron inspirándose y ganando presencia según avanzaba la noche. No es que comenzaran mal, pero la intensidad se fue palpando con un sonido potente y electrizante según aparecían sus clásicos “Last Chance” o “Rip It Up”, e himnos como la pegadiza y exitosa “Are you gonna be my girl” o la versión de sus queridos AC/DC It’s a long way to the Top”, que espolearon al muchísimo público que aún resistía a una última descarga de buen rock garagero contemporáneo de guitarras alfadlas y riffs cortante, que igual bebía de los Who más salvajes que de los Stones más febriles. Sin concesiones salvo en un par de preciosos y necesarios tempos lentos que a esas horas sirvieron para reponer fuerzas o dar fin a una jornada ¡bien completa!  

30 julio 2025

MARCUS KING - DEWOLFF (17-7-25) Las Noches del Botánico. Publicado en la web Rock and Roll Army

 
Programa doble con las guitarras y los sonidos más añejos como protagonistas que abrieron DeWolff. El trío neerlandés se mostró muy versátil recorriendo los variados  estilos  que el citado sonido engloba. Hubo Rock setentero, psicodelia eléctrica o soul bailable… con dos coristas bien dosificadas en sus funciones. Todo ello ejecutado con desparpajo con un Pablo van de Poel que repartió júbilo desde el escenario con su guitarra, movimientos y sus “motherfuckers”. No dieron respiro, si acaso en la purpeliana “Out on the Town” con el Hamond de Luka Van de Poel como protagonista,  o en los primeros minutos de “Snowbird” extenso desarrollo a lo Santana que culminó en delirio instrumental de teclados y la batería de Robin Piso brillando. Canciones de su último trabajo Muscle Shoals (Mascot 2024) que abarcó la mayor parte del repertorio de la candente (dentro y fuera) tarde-noche en el Botánico. En apariencia retro, las pintas y puerta en escena no indican lo contrario, ofrecieron un concierto en el que los amplios márgenes de rock sonaron bailables… ¡y divertidos! Pero sin perderé la esencia como se pudo apreciar en “Rosita” canción que se alargó hasta los veintidós minutos con su carismático líder entre el público y la banda en febril jam instrumental. 
 
De noche Marcus King se marcó dos horas de orgía guitarrera en la que no faltó country rock, blues grasiento, soul denso y algo de honky tonk. El treintañero de North Carolina se explayó sin límite en duelos de guitarra a dúo con Drew Smithers, o el mismo y su variado despliegue de eléctrica y acústicas, que cambiaba incluso en la misma canción y es que fue una constante que iniciara  las melodías a fuego lento para acabar estallando en algarabía de punteos eléctricos. La base de teclados funcionó como mediador en dichos despliegues guitarreros, estructuras que se repitieron a lo largo del concierto y que en bastantes momento dejaban sensación de déjà vu. Entre festivas melodías se colaron algunas lentas que dispersaron un poco la atención, pero la vuelta al desenfreno consiguió poner de nuevo al público en órbita. Presentó además algunas canciones de su próximo trabajo: medios tiempos de ligero aire country con la acústica y la slide para acabar un bis largo con “Ramblin’ Man” de los Allman Brother a los que de forma más o menos explícita rindió pleitesía durante toda una noche… de homenaje además a las guitarras rockeras.

18 julio 2025

JAMES – TEENAGE FANCLUB (16-7-25) Las Noches del Botánico. Publicado en el web Rock and Roll Army

James
Atractivo programa doble de enérgico pop británico (no de brit-pop) que abrieron Teenage Fanclub. Los de Glasgow son siempre un seguro de vida en directo… si las circunstancias no lo impiden,  y una vez más, tras el dislate sónico de su última aparición en la capital en el Teatro Albeniz (otoño de 2023) de infausto recuerdo, las circunstancias lo volvieron a impedir en forma de un sonido impropio de un reciento intachable en este aspecto. No hubo manera, en pista sonaban las guitarras opacas y superpuestas, enmarañadas en graves y sin pulsión eléctrica. En la grada parecía diferenciarse algo, aunque con disonancias de volumen constantes, solo de frente en la grada alta parecía mejorar… algo, por no hablar de la poca potencia de sonido, ¡casi mejor así!
 
Al final del concierto parece que alguien toco la tecla acertada, precisamente en las canciones donde la tormentosa distorsión eléctrica fue la protagonista, las legendarias  «The Concept» y «Everything Flow» con la que se despidieron y que fue lo más disfrutable. Hasta entonces difícil concentrarse aunque el reconocible cancionero de Norman Blake y compañía ayude, ni siquiera himnos como el tempranero «About You» o clásicos incontestables del Bandwagonesque como «Alcoholyday», «Metal Baby», «What You Do To Me» conseguían más que generar ligeros cabeceos  y contoneos de cadera. El destacable cancionero reciente, trufado de medios tiempos ¡que ya no están las muñecas para mucho nervio guitarreo! se intercaló con elegancia junto a canciones de aquí y de allá, pero no era el día… ni la hora, que empezar a las 20:15 con el sol aún pegando en plena ola de calor, fue un suplicio. En fin que decir… ¡que no se lo merecen joder!  
 
Teenage Fanclub
 
En cambio con James todo volvió a la normalidad, con un sonido impoluto, potente y nítido en toda su instrumentación, como es habitual en este recinto. Los de Manchester comenzaron de forma sorpresiva en la grada, con Tim Both y Chloe Alper a la voz, acompañados únicamente por la acústica y la trompeta para interpretar una emotiva «Lost Control»
que sonó según avanzaban por parte del recinto hasta llegar al escenario y continuar en los terrenos del pop sensible, enérgico y directo a la vena con «Way Over Your Head» de su último trabajo Yummy (Virgin 2024) del que su Tim recordó posteriormente que se sentía genial por haber conseguido su primer número uno en el Reino Unido después de cuarenta años.
 
Épica contenida que continúo con clásicos como la folky «Five-O» con un destacable duelo de violín eléctrico y bajo, además de con «She Is A Star»  muy Manic Street Preachers con Tim bajándose al foso para sentir la cercanía del entregado público, La crítica “iuesei” llegó con la tribal «Head» donde batería y percusión fueron protagonistas. «Shadow of a Giant» otra de las nuevas mostró otro duelo instrumental en este caso entre el violín, los teclados y la batería mientras las voces en coro y trompeta parecían poner fin a la contienda. Inesperado y buen momentos de la noche que continúo con otra de las novedades «Better With You» con la que tambien se reivindicaron como una banda del presente. 
 
«Moving On» sonó muy Belle and Sebastian pero fue con «Born of Frustration» es cuando el público se vino definitivamente arriba y a levantarse de los asientos de grada con sus “lalaralalas” y su embaucadora trompeta. También con la sobrecogedora melodía de «Tomorrow». Se atemperaron los exaltados ánimos en la alargada versión que hicieron de «Sound» para finalizar con  «Out to Get You» que sonó lo más country que esta banda pueda hacerlo.
 
En el bis siguió el festín sonoro no cesó, y es que los ocho mosaicos sin virtualizar su  maestría individual, funcionaron como mejoradas piezas en su conjunto. «Beatiful Beaches» y «Getting Away With It (All Messed Up)» se reforzaron como pop potente y voluminoso, pero menos grandilocuente y la mítica «Laid» recordó más que nunca a Beatles, para acabar con el infalible y pegadizo estribillo de «Sit Down» como ideal y “confetitero” fin de fiesta tras dos apasionadas y magnéticas horas de alto voltaje. Una maravilla.

17 julio 2025

BETH GIBBONS (15-7-25) Las Noches del Botánico - Madrid. Publicado en la web Rock and Roll Army.

El incomparable marco natural y sonoro del cómodo recinto de la madrileña Ciudad Universitaria  (un oasis urbano frente a las calurosas noches de verano capitalinas), amplificó la magnitud emocional que ya de por si transmiten las canciones de la menuda artista británica. Acompañada por una banda de siete músicos donde no faltaron violines, saxos, teclados y una amplia gama de percusiones varias, ofrecieron una actuación para recordar, a la altura de hitos cercanos en el mismo recinto como PJ Harvey el pasado año o Imelda May hace ya dos. 
 
Con su aún reciente último trabajo Lives Outgrown  (Domino 2024) como protagonista, interpretado íntegramente  y en un orden más o menos parecido, la ex Portishead conmovió con un cancionero que sonó trascendente y a la vez cercano con su voz, unas veces frágil, otras (la mayoría de ellas) decidida, envolvió las canciones bajo un aura folk en su versión más inquietante, en las iníciales «Tell me how you are today» y «Brudem of Life», pero también tenebrosa y tribal  en «Floating on a Moment» y «Rewind» con las percusiones multiplicándose y los arreglos de cuerda retorciéndose. Momentos de liturgia sonora con los músicos concentrados en sus milimétricos arreglos y Beth sin concesiones más allá de sus personales historias, y es que no fue hasta bien entrada la noche, tras «Misteryes» recuperada de su disco conjunto con el Talk Talk Rustin Man Out of Season (Go Beat! 2002) del que también recuperó «Torn the Model», cuando de su boca salieron las primeras palabras para presentarse y agradecer presencia… ¡se hizo mortal!  
 
La conmoción sonora se diluyó brevemente en las siguientes dos o tres canciones, no por perdida de intensidad y emoción, sino como antídoto natural aplicado como anestesia ante la embaucadora pócima instrumental que emanaba del escenario… hasta que  la trepidante y atávica «Beyond the Sun» y el lirismo de «Whisperin Love» desataron de nuevos los espíritus,  para retirarse con graciosos gestos de Beth que evidenciaban inminente regreso a escena. Así fue volvieron enseguida con las esperadas aportaciones de su seminal banda de origen Portishead. Primero «Rots» ante un ensordecedor y reverencial silencio, uno de esos momentos mágicos que de vez en cuando se producen en este veraniego ciclo, y después con una bipolar versión tormentosa y desnuda de «Glory Box» para terminar reivindicando su presente desatando de nuevo la pulsión ancestral con «Reching Out», en una noche para el recuerdo.

15 julio 2025

DADDY LONG LEGS (9-7-25) El Sol - Madrid. Publicado en la web Rock And Roll Army.


Nueva visita de los de Brooklin a la capital, ya se han recorrido todas las salas de aforo medio con los mismos resultados, fiesta asegurada y un público que repite y crece en número gracias a un excelente directo que corre como la pólvora en boca de los aficionados. Esta noche no fue diferente, nueva descarga de blues en su sentido más festivo y salvaje desde el primitivo blues del Delta al tabernario punk-rock británico con muchas dosis de rihtmanblues en su versión más acelerada y de rock and roll fifft resultón. Brinad Hunt al frente volvió a hacer de las suyas, ya sea con la harmónica, el dobro o simplemente al micro, sabiendo en todo  momento manejarse para mantener una intensidad que el excitado público pedía... y recibía. 
 
Diabluras asentadas en los primitivos ritmos de batería de Josh Styles, que en alarde de locura final se hizo protagonista bombo en alto zarandeándolo por el escenario mientras Murat Aktürk se unía a la fiesta con su guitarra, y en el teclado, Dave T. Wave una nueva patas más para la araña, al menos en directo,  conexionaba el delirio sónico además de aportar nuevos matices a las canciones, que además de crudas sonaron con brillo.  Fieles a sus raíces no faltaron versiones de Flamin’ Groovies y Link Wray para echar más gasolina al fuego a una sudorosa, alegre y festiva noche de verano en el que los garitos siguen programando mucho y bien, que aun son muchos los que disfrutan de ello…  no todo va a ser macro y al aire libre  ¿no?

14 julio 2025

NORTH MISSISSIPPI ALLSTARS (4-7-25) El Sol - Madrid. Publicado en la web Rock and Roll Army.

Foto: Joe Herrero
 
Todo vendido en la nueva visita de los hermanos Dickinson, que en formato trío presentaron su recientísimo nuevo trabajo  Still Shakin’ (New West). No fue en todo caso el disco protagonista de la noche, pues tienen reportorio para dar y tomar, además de las variaciones que proponen de sus viejas canciones. Puntuales y a hora temprana para aprovechar bien el tiempo y los límites horarios –se extendieron generosos hasta las dos horas de actuación- ofrecieron sugestivo recorrido por las sendas del más pantanoso blues, pero ejecutado como si de una banda de jazz se tratara, para conseguir sonar primitivos pero no añejos, recogiendo la esencia para servirla envuelta en un eco actualizado, aunque arreglada con un barniz hillbilly, funky y space-rock con desarrollos instrumentales más o menos extensos en los que la guitarra de Luther fluía libre como cual lisérgica jam-blues.
 
Mientras Cody en la batería se marcó algunos solos muy jazzeros y con la tabla de lavar electrificada logró, con Luther en la batería, montarse una tribal rave discotequera de rítmico contundente y repetitivo, para volver al orden, si es que lo hubo en algún momentos de esta hipnótica y expansiva noche actualizando como es habitual a R.L. Burnside, «Po Black Maddie» y en un bis aleccionador a Robert Johnson: «Preachin’ Blues» que han grabado de nuevo para incluir en su citada última grabación, Junior Kimbrough «Lord Have Mercy» y Buba White «Shake ‘Em On down» para acabar con  Mississippi Fred McDowel «Back Back Train» en una sorpresiva último capítulo del repoker de ases del blues que pillo a algunos ya en la calle. El blues de estos tipos es el suyo, el del ahora… que es el de siempre sonando como nunca.