Tras el salto de calidad que dieron con su disco del pasado año, "Rompecabezas de moda y perfección moral", el principal aliciente era escuchar nuevas canciones de lo que será su próximo disco "Adorno". Como adelanto canción sobresalió "Bono en Dios" controvertida letra, en la que con ¿ironía? ponen a caldo a bandas como Simple Minds o U2 en el contexto costumbrista generacional ochentero que recurrentemente aparece en varias de sus canciones. Musicalmente la canción se agarró al guitarreo crudo de ambiente oscuro... trepidante.
Entre ruido de guitarras y melodías progresivas fueron tensando y avanzando "Madrid" hasta llegar al estallido final "La policía" con Garikoitz su cantante, en el suelo haciendo todo tipo de experimentos sonoros con el sintetizador, las distorsiones y aparatos varios.
Aparecieron después los barceloneses Tarántula, con un público más animado tras la descarga ornamental. mostraron sus canciones entre el surrealismo ochentero y la modernidad noventera entre sonidos pseudo rockabillys y zarzueleros, auténticos himnos kitchs con letras satíricas pero certeras. Especial atención a la batería, fundamental al menos en directo, para sostener el show que se monta su cantante. Constante repiqueteo de percusiones circenses, en una batería que no paraba ni entre canción y canción. No faltaron para terminar los himnos propios como "Empresarios y secretas" y "Mujer española". Delirantes.
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