THE CYNICS (20-9-19) El Sol - Madrid

Agonizaban los años 80, y el garaje revival resistía en escasos pero potentes enclaves como el barrio de Malasaña en Madrid, en cuyos garitos no paraban de sonar bandas (australianos aparte) como The Fuzztones, Chesterfield Kings, Miracles Workers, The Fleshtones... los autóctonos Sex Museum de los hermanos Pardo o Pleasure Fuckers del añorado Kike Turmix...  lisérgicos unos, macarras otros, enérgicos todos ellos...

...y entre los que recogen el testigo del garaje sesentero más crudo y proto-punk (dejando el psicodélico para otras bandas) nos encontramos con The Cynics, que en el año que cerraba la década grabaron "Rock and Roll" su tercer disco, que con el tiempo se ha convertido en una  especie de canto del cisne generacional, pues llegaban los 90'... etapa difícil para el "garajeo", que se replegaba en lo más profundo del "undergorund".

Casi todos ellos han seguidos editando discos y girando en tiempos difíciles y estas tierras siempre han sido parada segura para estas bandas, pues un buen número de seguidores ¡ ya en edad en el mayor de los casos ! sigue resistiendo, así que... que mejor lugar para celebrar el treinta aniversario del célebre "Rock and Roll" que en la mítica sala El Sol (celebrando también sus 40 años).

Al frente siguen Michael Kastelic y Gregg Kostelich comprometidos y derrochando energía, sobre todo Michael cuya voz va notando el paso del tiempo... ¡ y es que si en todos los conciertos se mete pal cuerpo botella en mano los lingotazos de tequila que se bebió... ! Pero a entusiasmo y actitud no le gana nadie, además ahí estaban la sección rítmica de Dr. Explosion: Pibli González a la batería y Ángel Kaplan al bajo, que desde hace más de una década vienen acompañando a los de Pittsburg, y que son todo un seguro de vida. Potentes pero sobrios respaldando el lucimiento de guitarras y voces.

Las canciones se sucedieron de forma frenética, dos, tres minutos por tema casi más rápido que en la grabación original ¡ y ya es difícil ! más con algún respiro breve eso si como en "Now I'm alone" donde el punteo de guitarra y la voz concedieron cierto espacio a melodías menos aceleradas. No faltaron las versiones incluidas en el disco: "Last time around" de The Del-Vetts" y Cry, cry cry de "Unreleated Segments" desconocidas bandas de los sesenta del noreste norteamericanos a reivindicar. Se ventialaron el concierto en unos cinco cuartos de hora que pasaron volando y... que esto no pare... hasta la próxima.