30 julio 2025

MARCUS KING - DEWOLFF (17-7-25) Las Noches del Botánico. Publicado en la web Rock and Roll Army

 
Programa doble con las guitarras y los sonidos más añejos como protagonistas que abrieron DeWolff. El trío neerlandés se mostró muy versátil recorriendo los variados  estilos  que el citado sonido engloba. Hubo Rock setentero, psicodelia eléctrica o soul bailable… con dos coristas bien dosificadas en sus funciones. Todo ello ejecutado con desparpajo con un Pablo van de Poel que repartió júbilo desde el escenario con su guitarra, movimientos y sus “motherfuckers”. No dieron respiro, si acaso en la purpeliana “Out on the Town” con el Hamond de Luka Van de Poel como protagonista,  o en los primeros minutos de “Snowbird” extenso desarrollo a lo Santana que culminó en delirio instrumental de teclados y la batería de Robin Piso brillando. Canciones de su último trabajo Muscle Shoals (Mascot 2024) que abarcó la mayor parte del repertorio de la candente (dentro y fuera) tarde-noche en el Botánico. En apariencia retro, las pintas y puerta en escena no indican lo contrario, ofrecieron un concierto en el que los amplios márgenes de rock sonaron bailables… ¡y divertidos! Pero sin perderé la esencia como se pudo apreciar en “Rosita” canción que se alargó hasta los veintidós minutos con su carismático líder entre el público y la banda en febril jam instrumental. 
 
De noche Marcus King se marcó dos horas de orgía guitarrera en la que no faltó country rock, blues grasiento, soul denso y algo de honky tonk. El treintañero de North Carolina se explayó sin límite en duelos de guitarra a dúo con Drew Smithers, o el mismo y su variado despliegue de eléctrica y acústicas, que cambiaba incluso en la misma canción y es que fue una constante que iniciara  las melodías a fuego lento para acabar estallando en algarabía de punteos eléctricos. La base de teclados funcionó como mediador en dichos despliegues guitarreros, estructuras que se repitieron a lo largo del concierto y que en bastantes momento dejaban sensación de déjà vu. Entre festivas melodías se colaron algunas lentas que dispersaron un poco la atención, pero la vuelta al desenfreno consiguió poner de nuevo al público en órbita. Presentó además algunas canciones de su próximo trabajo: medios tiempos de ligero aire country con la acústica y la slide para acabar un bis largo con “Ramblin’ Man” de los Allman Brother a los que de forma más o menos explícita rindió pleitesía durante toda una noche… de homenaje además a las guitarras rockeras.

18 julio 2025

JAMES – TEENAGE FANCLUB (16-7-25) Las Noches del Botánico. Publicado en el web Rock and Roll Army

James
Atractivo programa doble de enérgico pop británico (no de brit-pop) que abrieron Teenage Fanclub. Los de Glasgow son siempre un seguro de vida en directo… si las circunstancias no lo impiden,  y una vez más, tras el dislate sónico de su última aparición en la capital en el Teatro Albeniz (otoño de 2023) de infausto recuerdo, las circunstancias lo volvieron a impedir en forma de un sonido impropio de un reciento intachable en este aspecto. No hubo manera, en pista sonaban las guitarras opacas y superpuestas, enmarañadas en graves y sin pulsión eléctrica. En la grada parecía diferenciarse algo, aunque con disonancias de volumen constantes, solo de frente en la grada alta parecía mejorar… algo, por no hablar de la poca potencia de sonido, ¡casi mejor así!
 
Al final del concierto parece que alguien toco la tecla acertada, precisamente en las canciones donde la tormentosa distorsión eléctrica fue la protagonista, las legendarias  «The Concept» y «Everything Flow» con la que se despidieron y que fue lo más disfrutable. Hasta entonces difícil concentrarse aunque el reconocible cancionero de Norman Blake y compañía ayude, ni siquiera himnos como el tempranero «About You» o clásicos incontestables del Bandwagonesque como «Alcoholyday», «Metal Baby», «What You Do To Me» conseguían más que generar ligeros cabeceos  y contoneos de cadera. El destacable cancionero reciente, trufado de medios tiempos ¡que ya no están las muñecas para mucho nervio guitarreo! se intercaló con elegancia junto a canciones de aquí y de allá, pero no era el día… ni la hora, que empezar a las 20:15 con el sol aún pegando en plena ola de calor, fue un suplicio. En fin que decir… ¡que no se lo merecen joder!  
 
Teenage Fanclub
 
En cambio con James todo volvió a la normalidad, con un sonido impoluto, potente y nítido en toda su instrumentación, como es habitual en este recinto. Los de Manchester comenzaron de forma sorpresiva en la grada, con Tim Both y Chloe Alper a la voz, acompañados únicamente por la acústica y la trompeta para interpretar una emotiva «Lost Control»
que sonó según avanzaban por parte del recinto hasta llegar al escenario y continuar en los terrenos del pop sensible, enérgico y directo a la vena con «Way Over Your Head» de su último trabajo Yummy (Virgin 2024) del que su Tim recordó posteriormente que se sentía genial por haber conseguido su primer número uno en el Reino Unido después de cuarenta años.
 
Épica contenida que continúo con clásicos como la folky «Five-O» con un destacable duelo de violín eléctrico y bajo, además de con «She Is A Star»  muy Manic Street Preachers con Tim bajándose al foso para sentir la cercanía del entregado público, La crítica “iuesei” llegó con la tribal «Head» donde batería y percusión fueron protagonistas. «Shadow of a Giant» otra de las nuevas mostró otro duelo instrumental en este caso entre el violín, los teclados y la batería mientras las voces en coro y trompeta parecían poner fin a la contienda. Inesperado y buen momentos de la noche que continúo con otra de las novedades «Better With You» con la que tambien se reivindicaron como una banda del presente. 
 
«Moving On» sonó muy Belle and Sebastian pero fue con «Born of Frustration» es cuando el público se vino definitivamente arriba y a levantarse de los asientos de grada con sus “lalaralalas” y su embaucadora trompeta. También con la sobrecogedora melodía de «Tomorrow». Se atemperaron los exaltados ánimos en la alargada versión que hicieron de «Sound» para finalizar con  «Out to Get You» que sonó lo más country que esta banda pueda hacerlo.
 
En el bis siguió el festín sonoro no cesó, y es que los ocho mosaicos sin virtualizar su  maestría individual, funcionaron como mejoradas piezas en su conjunto. «Beatiful Beaches» y «Getting Away With It (All Messed Up)» se reforzaron como pop potente y voluminoso, pero menos grandilocuente y la mítica «Laid» recordó más que nunca a Beatles, para acabar con el infalible y pegadizo estribillo de «Sit Down» como ideal y “confetitero” fin de fiesta tras dos apasionadas y magnéticas horas de alto voltaje. Una maravilla.

17 julio 2025

BETH GIBBONS (15-7-25) Las Noches del Botánico - Madrid. Publicado en la web Rock and Roll Army.

El incomparable marco natural y sonoro del cómodo recinto de la madrileña Ciudad Universitaria  (un oasis urbano frente a las calurosas noches de verano capitalinas), amplificó la magnitud emocional que ya de por si transmiten las canciones de la menuda artista británica. Acompañada por una banda de siete músicos donde no faltaron violines, saxos, teclados y una amplia gama de percusiones varias, ofrecieron una actuación para recordar, a la altura de hitos cercanos en el mismo recinto como PJ Harvey el pasado año o Imelda May hace ya dos. 
 
Con su aún reciente último trabajo Lives Outgrown  (Domino 2024) como protagonista, interpretado íntegramente  y en un orden más o menos parecido, la ex Portishead conmovió con un cancionero que sonó trascendente y a la vez cercano con su voz, unas veces frágil, otras (la mayoría de ellas) decidida, envolvió las canciones bajo un aura folk en su versión más inquietante, en las iníciales «Tell me how you are today» y «Brudem of Life», pero también tenebrosa y tribal  en «Floating on a Moment» y «Rewind» con las percusiones multiplicándose y los arreglos de cuerda retorciéndose. Momentos de liturgia sonora con los músicos concentrados en sus milimétricos arreglos y Beth sin concesiones más allá de sus personales historias, y es que no fue hasta bien entrada la noche, tras «Misteryes» recuperada de su disco conjunto con el Talk Talk Rustin Man Out of Season (Go Beat! 2002) del que también recuperó «Torn the Model», cuando de su boca salieron las primeras palabras para presentarse y agradecer presencia… ¡se hizo mortal!  
 
La conmoción sonora se diluyó brevemente en las siguientes dos o tres canciones, no por perdida de intensidad y emoción, sino como antídoto natural aplicado como anestesia ante la embaucadora pócima instrumental que emanaba del escenario… hasta que  la trepidante y atávica «Beyond the Sun» y el lirismo de «Whisperin Love» desataron de nuevos los espíritus,  para retirarse con graciosos gestos de Beth que evidenciaban inminente regreso a escena. Así fue volvieron enseguida con las esperadas aportaciones de su seminal banda de origen Portishead. Primero «Rots» ante un ensordecedor y reverencial silencio, uno de esos momentos mágicos que de vez en cuando se producen en este veraniego ciclo, y después con una bipolar versión tormentosa y desnuda de «Glory Box» para terminar reivindicando su presente desatando de nuevo la pulsión ancestral con «Reching Out», en una noche para el recuerdo.

15 julio 2025

DADDY LONG LEGS (9-7-25) El Sol - Madrid. Publicado en la web Rock And Roll Army.


Nueva visita de los de Brooklin a la capital, ya se han recorrido todas las salas de aforo medio con los mismos resultados, fiesta asegurada y un público que repite y crece en número gracias a un excelente directo que corre como la pólvora en boca de los aficionados. Esta noche no fue diferente, nueva descarga de blues en su sentido más festivo y salvaje desde el primitivo blues del Delta al tabernario punk-rock británico con muchas dosis de rihtmanblues en su versión más acelerada y de rock and roll fifft resultón. Brinad Hunt al frente volvió a hacer de las suyas, ya sea con la harmónica, el dobro o simplemente al micro, sabiendo en todo  momento manejarse para mantener una intensidad que el excitado público pedía... y recibía. 
 
Diabluras asentadas en los primitivos ritmos de batería de Josh Styles, que en alarde de locura final se hizo protagonista bombo en alto zarandeándolo por el escenario mientras Murat Aktürk se unía a la fiesta con su guitarra, y en el teclado, Dave T. Wave una nueva patas más para la araña, al menos en directo,  conexionaba el delirio sónico además de aportar nuevos matices a las canciones, que además de crudas sonaron con brillo.  Fieles a sus raíces no faltaron versiones de Flamin’ Groovies y Link Wray para echar más gasolina al fuego a una sudorosa, alegre y festiva noche de verano en el que los garitos siguen programando mucho y bien, que aun son muchos los que disfrutan de ello…  no todo va a ser macro y al aire libre  ¿no?

14 julio 2025

NORTH MISSISSIPPI ALLSTARS (4-7-25) El Sol - Madrid. Publicado en la web Rock and Roll Army.

Foto: Joe Herrero
 
Todo vendido en la nueva visita de los hermanos Dickinson, que en formato trío presentaron su recientísimo nuevo trabajo  Still Shakin’ (New West). No fue en todo caso el disco protagonista de la noche, pues tienen reportorio para dar y tomar, además de las variaciones que proponen de sus viejas canciones. Puntuales y a hora temprana para aprovechar bien el tiempo y los límites horarios –se extendieron generosos hasta las dos horas de actuación- ofrecieron sugestivo recorrido por las sendas del más pantanoso blues, pero ejecutado como si de una banda de jazz se tratara, para conseguir sonar primitivos pero no añejos, recogiendo la esencia para servirla envuelta en un eco actualizado, aunque arreglada con un barniz hillbilly, funky y space-rock con desarrollos instrumentales más o menos extensos en los que la guitarra de Luther fluía libre como cual lisérgica jam-blues.
 
Mientras Cody en la batería se marcó algunos solos muy jazzeros y con la tabla de lavar electrificada logró, con Luther en la batería, montarse una tribal rave discotequera de rítmico contundente y repetitivo, para volver al orden, si es que lo hubo en algún momentos de esta hipnótica y expansiva noche actualizando como es habitual a R.L. Burnside, «Po Black Maddie» y en un bis aleccionador a Robert Johnson: «Preachin’ Blues» que han grabado de nuevo para incluir en su citada última grabación, Junior Kimbrough «Lord Have Mercy» y Buba White «Shake ‘Em On down» para acabar con  Mississippi Fred McDowel «Back Back Train» en una sorpresiva último capítulo del repoker de ases del blues que pillo a algunos ya en la calle. El blues de estos tipos es el suyo, el del ahora… que es el de siempre sonando como nunca.
 


13 julio 2025

THE WOGGLES / THE FUZZY FOR HER (3-7-25) Fun House Madrid). Publicado en la web Rock and Roll Army.


No hace ni seis meses que actuaron en la sala El Sol con motivo de la fiesta 15º aniversario de FOLC Records y los de Atlanta se plantaron de nuevo en la capital… sin motivo aparente ni falta que les hace, si acaso celebrarse a sí mismos como banda con más de treinta años en activo y con un presente envidiable. Una actuación de puro nervio y entrega desde el primer minuto… también aplicable a Fuzzy For Her que como teloneros ofrecieron una excitante descarga de rock garagero sixty de querencia psicodélica con algunos arrebatos de punk... que su cantante Raúl Ausucua defendió con vehemencia y credibilidad, y es que se lanzó cual poseso a recorrer la sala y tirarse por los suelos, igual cuando había poco público aún -por lo temprano del comienzo del doble bolo- que cuando ya había buen ambiente. Diabluras en las que se pudo recrear gracias al respaldo de una banda eficaz y experimentada con las dos eléctricas brillando, la farfisa  revoloteando en el espacio  y una base rítmica marcando la pauta del delirio sónico. 

 

Después The Woggles impartieron una nueva lección de garaje expansivo. Elegantemente trajeados como siempre con Mighty Manfred “The Professor” como maestro de ceremonias, culebreando también entre el público pandereta en mano, vehemente en el escenario en su constante y vacilón cimbreo… quién lo diría cuando un rato antes parecía mimetizarse  como un tranquilo vecino más en un bar del señorial barrio de Chamberí, para verle luego en cimbreante contoneo ¡que agilidad la de este hombre a sus edad! Sin perder el tono mientras maneja al público a su antojo. Sonaron muy rockeros y crudos, más garageros que soul -sin el saxo- e incluso más primitivos, con más beat que fuzz, controlado este último con un Graham Day inconmensurable a las seis cuerdas eléctricas, como mandan los cañones de Chubby Checker en «Karate Monkey» Un fiestón más con los clásicos del The Big Beat (Wicked Cool, 2013), sonando: «Jezebel» o «Big Beat Strong» junto a las del último Time Has Come (Wicked Cool, 2014) que voló de las mesa del “merchan”…¡ah y el próximo domingo repiten! pues eso, parece que se quedan como unos más por el barrio.

12 julio 2025

Sirat - OLIVER LAXE (Da Ermida, El Deseo, Movistar+, 4A4, Uri, Bteam). Publicado en la web Rock and Roll Army.

Coproducción hispano-francesa dirigida por el parisino de doble nacionalidad, que tras la aclamada O que arde, vuelve a filmar en la naturaleza salvaje, en este caso en un escenario radicalmente opuesto al de bosque gallego, como es el desierto marroquí en el que se sitúa esta película… que deja poso, trasciende y queda en la retina por un tiempo, y en el que la trama, poco consistente porque no es lo importante aquí, queda supeditada a la radical y magnética puesta en escena visual y sonara, que desde las primeras imágenes impacta y atrae mientras se monta un entramado de gigantes bafles cuyo atronador sonido brama en medio del desierto… que recuerda al Live in Pompeya de Pink Floyd pero quintiplicado en decibelios y con música trance que a lo largo del metraje… ¡incluso consigue enganchar!
 
En inhóspito y hermoso lugar se celebra una rave en la que desentona la presencia de un hombre maduro y su hijo (inexplicable que acompañe al padre en dicho lugar) que buscan a su hija–hermana desaparecida, una habitual de estos eventos. Desde allí comienza una peligrosa odisea para seguir su búsqueda en una próxima fiesta, acompañado a cinco habituales seguidores de este hedonista-escapista movimiento cultural.
 
Surge así una mezcla de géneros entre la intriga, la aventura, el western y la road movie en la que los seis protagonistas cual “esay riders” persiguen sus objetivos en huída hacia adelante mientras puntuales noticias anuncian la zozobra política mundial. Aparecen contantes y reflexivos simbolismos en relación a una forma de vivir que prioriza lo colectivo sobre lo individual y que se plasma incluso en la prioridad por el presente y futuro, al margen del pasado, algo apenas pincelado en esta historia.
 
Los personajes no están perfilados, nada se sabe de su vida más allá del instante, salvo algún atisbo de planteamiento sobre la muerte de seres cercanos, pero el diálogo, a lo largo de la hora y tres cuartos de duración de la película, es escaso, preciso y siempre en torno a los momentos presentes que hay que superar, aunque eso sí, se atisban desgracias pasada en esta pequeña Parada de los Monstruos como índica el estampado de la camisa de uno de los dos significativamente tullidos personajes de esta familia que refleja tanto la que se elige, como la natural que también es un tema tratado aquí. En cuanto al guion deja noqueado al espectador con un par de radicales giros,  que se desmarcan y se alejan completamente del canon cinematográfico más previsible, pero impacta a la vez que hipnotiza entre imágenes y sonido potentes en intensidad y emoción.
 
Destacable que los actores, salvo Sergi López (el padre), no son profesionales, son personas que realmente viven la cultura rave, que aquí se reivindica como respuesta a una sociedad fracasada en la que el baile y el trance es el vínculo que nos une a la naturaleza humana en esencia que se cierra con un simbólico y precioso, pero desesperanzador final… o no, según se interprete, para la reflexión.   

 

11 julio 2025

Será todo para mí – ZEROCALCARE (Reservoir Books). Publicado en la web Rock and Roll Army.

Novela gráfica extremadamente autobiográfica en cuanto a las emociones  sentidas por el autor, como remarca el mismo en su página inicial en el que se expone la difícil relación con su padre, dibujado en forma de pato, y en la que parece de forma significativa además, la madre que en este caos aparece en forma de gallina.  
 
Una historia que da saltos en el tiempo tratando de explicar por qué padre e hijo se relacionan bajo el lastre de la incomunicación y como, los hechos del pasado condicionan el carácter de las personas larvándose y enquistándose como genes hereditarios entre generaciones, y que aquí se muestra en el viaje que ambos, padre e hijo realizan desde Roma a un lejano pueblo en los Dolomitas lugar de donde procede la familia del padre.
 
Historias que se remontan a las rencillas ancestrales entre pequeños pueblos vecinos, a partir de las cuales el autor-protagonista recorre de forma tangencial algunos de los episodios de la historia italiana (la I Guerra Mundial o las revueltas político sociales de los años 70’) y aunque no es el objetivo de estas trescientas páginas en blanco y negro, el autor muestra su punto de vista sobre la actualidad política de su país, relacionándola con el pasado del mismo… aunque el propósito de esta personal obra es reafirmarse el autor así mismo, conociendo la historia nunca contada del padre, para lograr entender el desentendimiento de ambos y tratar de arreglarlo, Ambos tratan de realizar el mismo proceso, pero desde diferentes posturas atendiendo a la lógica de la diferencia generacional. 
 
Lo hace bajo un apabullante, pero ordenado uso del diálogo y con referencias constantes al imaginario cultural-popular propio de su generación, la nacida en los 80’ y que en la actualidad se encuentra en la edad en la que muchos casos se plantea una crisis vital en la que la infancia-adolescencia no acaba de dejar paso a las supuestas y establecidas  responsabilidades adultas, que se refleja además en un dibujo entre lo naïf y el realismo que contrasta con las dudas e incertidumbres del identificable personaje. 

10 julio 2025

NIÑA COYOTE eta CHICO TORNADO – Atea (Pozoi Records). Publicado en la web Rock and Roll Army.

En el apenas minuto que dura “Trash” la canción que abre el disco, se grita con desesperación y de de forma repetitiva "Todo es basura, todo es basura, estoy cansada"  en diferentes lenguas Maika Makovski (catalán), Rodrigo Cuevas (asturiano), Bala (gallego), Ovidi Zigarros y Monica Le Ra (castellano), Waxy (inglés), además de Koldo Soret y Úrsula Strong el dúo donostiarra  firmante… sonando de seguido la canción que le da título “Atea”, que juega con el doble significado de en euskera (la puerta) y en castellano (persona que no cree o niega la existencia de un dios), que tras escucha del conjunto de canciones podría interpretarse como un trabajo abierto y al margen de ataduras… libre.
 
A partir y tras dejar, las cosas claras y bien definidas tras su anterior trabajo, un acercamiento a los sonidos latinos experimentando a modo de Niña Coyote eta Chico Tornado vs Don Condor eta Ñora Alacrán, regresan a su orden natural: el rock crudo “Ez Dut”, psicodélico “Gure Gau” y punk “Killer”, pero a todo a su manera, con los riffs de guitarras enfadados y vehementes y la batería cimentando sin piedad cual hormigón para áspero argamasado de guitarras. También se adentran en terrenos del primitivismo rockabilly emulando a los Cramps más rocosos en “Gure Gau” y al stoner en “Oh Yucca” una de las tres propuestas instrumentales, en el que suenan hasta los cuervos azuzados por el viento del desierto… 
 
...y  hasta consiguen hacer bailar con “Ezen Esan” glamuroso y muy sucio rock a lo T-Rex, pero todo a alto voltaje que lo único que brilla a lo largo de este trabajo es la arena y el polvo convertida en barro provocados por la  machacona tormenta instrumental de su básica pero turbulenta instrumentación. Destacable además el alarde vocal al límite en su volumen, y la colaboración del escritor y versolari Jon Maia en “Bidea Elurpean”… para finalizar con otro instrumental a modo de epílogo: el festivo rugido rapero-metalero de “Basque Panther Party”. 

09 julio 2025

WILLIAM TYLER –Indefinite (Psychic Hotline/Popstcok!). Publicado en el nº 437 de la revista Ruta 66.

El ex Lambchop y Silver Jews, en su carrera solita ha transitado por personales terrenos del folk sideral. Una instrumental inmersión en los sonidos de la naturaleza con los que generar ambientes escapistas, pero junto a
The Impossible Truth firmó uno de los viajes psicodélico-progresivo más excítenles del año (ver reseña en Ruta 415), y ahora de nuevo a su nombre, abandona las coordenadas marcadas por Endless Boogie para experimentar sin límite con el minimalismo radical vía Gavin Bryars. El guitarrista de Nasville abandona su instrumento favorito para hundir su particular “Titanic” en extensas piezas de sonido oxidado, en el que los loops, teclados, y sintetizadores se retuercen hasta llegar a confundirse con voces humanas. «Cabin Six» comienza con un incomodo ruido blanco que deviene ecos de luminosa esperanza, que parece llegar con la infecciosa decostrucción de «Concern» y la falsa alegría pseudo coral de «Star of Home». A partir de ahí, bellísimo descenso a la oscuridad abisal.

08 julio 2025

JULIEN BAKER & TORRES - Send A Prayer My Way (Matador/Popstock!). Publicado en el nº 437 de la revista Ruta 66.

Primer trabajo conjunto apuntalado en una amistad forjada en colaboraciones previas y conciertos, en el que aportan una personal visión del country-folk. No faltan los instrumentos clásicos del género: banjo, dobro o violín, arropando unas canciones que, ambientadas en los barrios obreros del sur de Estados Unidos, hablan sobre la infancia, la religión, las drogas o el amor. Domina la cadencia lenta «Downhill Both Ways» embauca en su juego de voces, y los medios tiempos «Bottom Of The Bottle» crece mientras suena su animada mandolina. Irrumpe algún arrebato guitarrero «Sugar In The Tanks» se expande entre cuerdas acústicas y eléctricas, y con todo ello generan horizontes sonoros tradicionales, pero rejuvenecidos gracias a unos arreglos de cuerda tenues que no cansan, suenan donde deben, apoyados en un acogedor teclado eléctrico. Herramientas sonoras con las que saltan los límites del género en «The Only Marble I've Got Left» un alegre honky-tonk de aire pop con la melodía muy presente.