30 septiembre 2024

THE HANGING STARS (27-9-24) Clamores - Madrid. Publicada en la web Rock & Roll Army.


Cualquiera diría que la banda que pasó por el escenario de la legendaria sala del barrio de Chamberí, proviene de Londres, y mucho menos que parte de sus miembros tengan origen sueco, neozelandés… pues lo que ofrecieron fue un brillantísimo viaje por los sonidos de la cosa oeste norteamericana, un recorrido por los 60’ y 70’ con influencias reconocibles, que sin embargo no sonaron nada retro y que comenzó con ‘Let Me Dream On You’ la canción que abre su último trabajo On A golden Shore (Loose 2024) título que refleja a la perfección las sensaciones que la banda provocó ante la numerosa audiencia.
 
Continuaron en tono country con ‘(I've Seen) The Summer In Your Eyes’ y ‘My Blue Eyed Song’ rememorando a Flying Burrito Brother, mientras rendían  homenaje al sonido Byrds en canciones de guitarra aclarada como ‘Happiness In My bird’ gran momento inicial con la banda brillando en voces y juegos corales. Sonidos que se proyectaban entre ecos de psicodelia  radiante y space-pop templado en viejas canciones como ‘Honeywater’ o ‘Weep & Whissper’ o recientes como ‘Disbelieving’ o ‘Sweet Light’, otro momento idílico con la slide y las guitarras en luminoso apogeo.
 
Según avanzaba la actuación, la psicodelia fue tomando leves tintes lisérgicos, sobre todo en algunos brotes de delirio, aunque sin grandes desfases a las seis cuerdas… muy Richard Lloyd. ‘Don't Want To Feel So Bad Anymore’ o en otra de sus canciones más  antiguas ‘The House On The Hill’ para desatarse por completo en el bis: ‘I Will Please You’ y ‘Mother On Earth’ fueron las que culminaron hora y media de reconfortante viaje, que dejó a los pasajeros contentos y felices como así comentaban camino del apreciado vinilo del merchandising   

 

29 septiembre 2024

GIGOLO AUNTS (25-9-24) El Sol - Madrid. Publicado en la web Rua 66

Foto: Salomé Sagüillo
 
Si España es la segunda casa de la banda como ha comentado recientemente Dave Gibbs, Madrid por afinidad -los añorados sellos Imposible y Bitterwseet además del activo Munster editaron material suyo décadas atrás-, sería el salón-comedor por el que se mueven cómodos y confiados. Doble fecha por tanto, pues las entradas para el salón del sábado se agotaron rápido, así que hubo que improvisar el comedor un miércoles, que se llenó de un público que no quería perderse la despedida de sus héroes juveniles, los que defendieron  la melodía pop en épocas dominadas por el sonido crudo y granuloso.
 
Noche pues de exaltación de las guitarras afiladas pero cristalinas y luminosas, con el repertorio enfocado en las canciones de Minor Chords and Major Themes que para celebrar esta gira de despedida con a la formación original, se ha editado en doble vinilo (con las demos) de venta solo en los conciertos ¡que volaron del merchan! antes… y después de la amigable y efervescente actuación que comenzó con «C’mon, C’mon» como efectivo y esperado pistoletazo de salida, seguida de «Half a Change» con Phil Hurley en la voz. Enseguida Dave cogió la acústica, que no soltaría hasta el tramo final y tras una animosa visita al pasado «Where  I Find My Heaven» de 1993 cuando grabaron su única trabajo para una multi,  apareció en BSO de Dos Tontos muy Tontos… engancharon  una serie de canciones con las que emocionaron gracias a sus harmonías vocales, coros y melodías de guitarra en tiempos lento «For a Moment», «Every One Can Fly» o «You’d Better Get Yourself Together, Bay», muy poco frecuentada en directo, con el teclado sonando de maravilla, al igual que en «Everuthing Is Wrong».
 
Foto: Salomé Sagüillo

Como cabía esperar sonó Girl For Yesterday» la nachapopera adaptación al inglés de «La Chica De Ayer» que sonó briosa  y con nervio contenido hasta el leve estallido de guitarras final, al igual que «Even Thought (The One Before The Last)» ambas con prístinos  y centelleantes punteos eléctricos. Justo cuando el público ya necesitaba empezar a mover el cuerpo, y no solo el cuello, Dave volvió a acompañar a Phil con la eléctrica,  para mirar de nuevo al pasado lejano : «Mrs Washington» sonó épica y nuevaolera y con «Mr Tomorrow» y «The Big Lie» llegó la exaltación del pop enérgico, alegre y armónico, duelo de eléctrico a las seis cuerdas incluido, para finalizar noventa minutos de de éxtasis pop reflejada en la cara del talludo personal, en un bis que primero bajó de revoluciones con el «Serious Drug» de BMX Bandits y volverlas a subir con la rockerizada «Super Ultra Wicked Mega Love». El idilio continúa… pero ya en el recuerdo… cercano.

20 septiembre 2024

Volveréis - JONÁS TRUEBA (Los Ilusos, Les Fils du Worseo, Arte France) Publicado en la web Rock & Roll Army

Un comedia en sentido más clásico durante la mayor parte del metraje, pero también de tinte existencial que reúne a su equipo habitual, tanto técnico, Los Ilusos, como artístico, la dupla protagonista la forman de nuevo la siempre eficiente y creíble Itxaso Arana y Vito Sanz, ambos participando como coautores del guion. El hilo conductor es el anuncio por parte de la pareja protagonista, Ale y Alex de la celebración de una fiesta para celebrar su separación tras quince años juntos, algo que deja perplejos a familiares y amistades según lo van contando. Este divertido punto de partida, más allá de lo cómico esconde un reflexivo poso filosófico sobre el amor, la convivencia, la ruptura y sobre todo las dudas que generan las decisiones... si no irreversibles, si al menos trascendentales.
 
Lo hace el menor de los Trueba con los ingredientes cinematográficos habituales en el director madrileño y que singulariza su personal forma  de entender y mostrar su cine: diálogos y situaciones muy naturales, fácilmente identificables en el día a día de cualquiera persona que… se traba en las conversaciones, se contradice en búsqueda de las palabras adecuadas que salen disparadas según se piensan, se pisan al hablar entre ellas… consiguiendo un cercano efecto de improvisación libre, que por momentos  recuerda al movimientos cinematográfica ‘dogma’ aunque sin serlo. 
 
También aporta su particular aura intelectual, que trata con desparpajo e incluso humor, lo que provoca interés verdadero por la materia tratada más que rechazo por la erudición de lo mostrado, con variadas y comentadas referencias bibliográficas, una de ellas El cine ¿puede hacernos mejores? De Stanley Cavell en estrecha relación con otra de las constantes en la filmografía de de su director el homenaje al cine, que en esta película muestra con referencias a Truffaut o a Bergman con el que introduce un novedoso aire espiritual a su cerebral propuesta la introducir un tarot creado con imágenes de películas del  magistral cineasta sueco. 
 
También aparece, el usual recorrido por Madrid y su callejero más reconocible y el que no tanto, de nuevo en calurosa estación estival, para mostrar el cotidiano costumbrismo de personajes y locales en peligro de extinción por gentrificación. No podía faltar tampoco el cine dentro del cine, ellas es directora y el actor de películas y a lo largo de la trama hay momentos que nos la diferencia entre ficción y realidad se confunde con el género documental. Interesantes y divertidas en ocasiones, aunque en este caso sobre todo al final, se hace demasiado reiterativa la propuesta meta-cinematográfica, lo mismo que el metraje, que en esta ocasión se extiende demasiado… no le sienta bien acercarse a los 120 minutos.
 
Eso si la narración es ágil y apoyada en elementos repetitivos usados como coletilla: “pero estamos bien” o el “volveréis” del título, genera la incertidumbre que planea sobre la historia en cuanto a las citadas dudas ante las decisiones, para un final que queda en el aire como el propio objetivo de la película que duda entre ser lineal o circular, como los propios personajes comenta en la película real. ¿o en la ficticia?   

 

17 septiembre 2024

CORDOVAS + Johnny Strikes (13-9-24) Copérnico - Madrid. Publicado en la web Rock & Roll Army

Cordovas

Buen ambiente en la sala con el público country-rock fiel a la cita, además de muchos aficionados habituales, al rockerío y las guitarras. Con extrema puntualidad apareció primero Johnny Strrikes teclista que acompaña a los de Nashville en esta gira, que ofreció, acompañado sólo por su teclado y caja de ritmos, un set entre crooner de recitados futuristas y discotequeo retro, valorable lo primero, no tanto lo segundo que… aunque curioso, salvo respetuosa primera fila, provocó indiferencia en el resto de la sala, que ante tan antagónica propuesta, prefirió comentarse el verano. Solo en su versión final de Bowie “Life on Mars?” hizo girar levemente las cabezas tras veinticinco minutos de actaución. 
 
Johnny Strrike

Cordovas comenzaron su actuación con varias canciones nuevas que serpenteaban sin rumbo fijo entre la psicodelia oscura… con algunos desajustes entre batería y bajo, que poco trasmitió al respetable… salvo algún atisbo Doors en teclado guitarra más algún buen juego de voces y coros cuando entró además la acústica en escena.  La noche remontó cuando sornaron menos evasivos y más resueltos en canciones como “Destinty” o “Hight Roller” junto al buen tempo de la luminosa “Sunset” y “High Feeling” con el público coreándola, aunque en “Somos Iguales” en castellano y con aires santaneros, fue recibida con disparidad de pareceres. 
 
Cordovas
 
El en bis se incorporó el violín, la batería se redujo a una caja que se adelantó a primera fila de escenario y Joe Firstman se colgó a la acústica para templar los espíritus con “Warm Ferewells” y acabar con un par de canciones, con él mismo al teclado, incluida la sprignsteeniana “Thunder Road” sin más instrumentos que el citado… en una actuación que fue de menos a más, bien sostenida por la eléctrica del eficiente  Lucca Soria, pero que no reflejó en directo, salvo en puntuales momentos, el dinamismo de unas canciones que sonaron dispersas en su habitual ‘instrumental jam’.

16 septiembre 2024

THE STEMS (11-9-24) El Sol - Madrid. Publicado en la web Ruta 66

Foto Salomé Sagüillo

El incombustible Dom Mariani es un clásico de los escenarios españoles, y los viejos aficionados han podido seguir su trayectoria de forma fluida ya sea con los, de momento extintos, DM3 o más recientemente con los activos Dature4, también ¡como no! con la banda con la que agitaron la escena australiana a mediados de los 80’ The Stems, que tras reunir de nuevo a dos terceras partes de la formación original hará diez años, parece querer darle continuidad. No necesita excusas el de Perth para lanzarse a la carretera, el público sigue respondiendo a la llamada, en todo caso y para la ocasión se presentó con nuevo single y disco grabado en directo como repaso a una trayectoria fiel a sus cuatro décadas de existencia.
 
Junto a Julian Matthews y Dave Shaw, más la incorporación a la guitarra de Ashley Naylor (ex The Church), repasaron su legado demostrando que la etiqueta del garaje-rock se les queda corta. Comenzaron muy hardbluseros con las guitarras sonando rocosas, pero marcando bien las melodías, que fueron las protagonistas en «For Always» mostrando esas cadencias pop a lo Byrds que le sienta tan bien a sus canciones. No olvidaron su vena más garagera revival: «Move Me» y «Tears Me In Two», cantada ésta por el nuevo guitarrista, sonaron puro Sonics y sorprendieron incluso en desgarradora y agitada actitud soul-rock en «Get To Know Me».
 
Foto: Salomé Sagüillo
 
Llenaron de luz la sala con «Never Be Friend» power-pop rockerizado en el que se lucieron en voces y coros, pero encendieron las velas con la oscura psicodelia de «Make you mine» con el «Baby Please Don’t Go» que estandarizara Joe William y popularizaran los Them de Van Morrison, como middley. Rindieron pleitesía s MC5 con su «Shaking Street» y en el bis, dos medios tiempos de sus inicios «At First Sight» y «Love Will Grow» que sonaron a gloria con esa cadencia de guitarras que los hace tan reconocibles. Entre ambas, «I’m Not Your Stepping Stone», clásico garagero sesentero de los norteamericanos The Riders, en una noche en la que los Stems fueron más allá de lo que son, demostrando que las guitarras siguen ahí, defendiendo el legado de los diferentes género del rock, aunque esta vez… se guardaron el biteliano  Day Tripper para otra ocasión.

15 septiembre 2024

THE WAVE PICTURE + Yo Somos (10-9-24) El Sol - Madrid. Publicado en la web Ruta 66

The Wave Picture

En agradable noche de verano tardío y tras los excesos sónicos del estío, el cartel se presentaba  ideal como regreso a la bendita rutina de los directos en sala, y es que las dos simpáticas y efervescentes propuestas, necesitaron  muy poco, como cantaron Yo Somos en una de sus más exultantes canciones, en cuanto a cacharreo instrumental para alegrar el regreso vacacional. Abrieron los valencianos, experimentadnos y curtidos en mil batallas pop, la última Flores, aunque Xema Fuertes y Cayo Bellveser estuvieron en Ciudadano, Maderita  y banda de directo de Josh Rouse y Alondra Bentley, y Quique Gallo en Midnight Shot y  Aullido Atómico, que se situaron alineados en la parte delantera del escenario armados con dos acústicas y una caja tocada con escobillas. 
 
Faltó la flauta, aunque con desparpajo, humor y descaro prestaron además de las canciones su estreno homónimo su reciente nuevo single «Ese lugar» que presentaron como “Sonic Flute” en homenaje al grupo al que se dedican a copiar descaradamente, Sonic Youth… perfecto antídoto para la manida, aunque lógica, relación del trío con Violent Femmes... y par aseguir jugando al despiste se marcaron un indescriptible  «La cosa más bella» de Eros Ramazzotti, voz nasal como guiño final incluido. Vaya craks.

Yo Somos

El trío de Leicestershire, The Wave Picture como buenos british aparecieron con sus pintas de guiri ¡esos calcetines y calzado…! para en hora y cuarto de vitalista actuación, irradiar sencilla felicidad a un público que aunque no colgó el cartel de no hay billetes, ocupó buena parte del aforo y disfrutó, casi de forma particular del péquelo show que se montaron sobre el escenario. Sin pedales de efectos, la tarima parecía huérfana, pero bastó la versátil guitarra de David Tattersall, el bajo de Franic Rozycki con sus inconfundibles punteos en plan guitarra solista,  junto a la velocidad y básica batería de Jonny Helm, que marcó con nervió el camino, tanto con las escobillas como con las baquetas y como divertido frontman, contagiando a la gente su simpatía. Se cantó además un par de canciones, una nueva «Sparkler» y otra…  abandonando la batería  para ponerse frente al micro en plan crooner para cantar casi ‘a capella’ una sentida «Sleepe Eyes» que sonó muy Lou Reed. 
 
Comenzaron haciendo pop soleado, para continuar con algo de psicodelia colorida,  hasta abrazar el garaje-pop «Pea Green Coat» sonó dinámica y  entusiasta, a partir de ahí, continuó la  fiesta de la melodía elemental, pero efectiva con los “lalalas”  de «Friday Night In Longborought» y la hermandad tabernaria deo himno  «I Love You Like A Madam»… para acabar con el «You Are Gonna Mess My» de 13th Floor Elevator. Complacientes y complacidos… y todos con los sonrisa en la boca.

14 septiembre 2024

MASSIVE ATTACK - OLIVIA DEAN - EZRA COLLECTIVE (31-8-24) Kalorama - IFEMA - Madrid. Publicado en la web Rock & Roll Army.

Massive Attack. @sergioalberts

Con el sol aún calentando, pero no directamente sobre el escenario, Ezra Collective ofrecieron un excitante coctel sonoro convirtiendo la gran explanada principal en su particular y multicolor rave al aire libre. Comenzaron los de Londres a ritmo de dub jamaicano con los hermanos Koleoso apuntalando el sonido a base de bajo y batería consistentes y ascendentes. A partir de ahí, el saxo y trompeta junto a los teclados, brillaron en incendiario cálido ciclón de sonidos latinos, soul, jazz, boogaloo, en una contina progresión de melodías y ritmos con mayor incidencia en su último tranbajo Where I Meant To Be que presentaron hace y medio en Madrid, en sala de reducido aforo, como ellos mismos comentaron. Cada uno de los músico tuvo su protagonismo en individuales intervenciones y el público vibró sobre todo con las pegadizas «Victory Dance» «Welcome to my World».
 
Ezra Collectiv. Foto:@sergioalberts

Entre el día y la noche, la también londinense Olivia Dean en su primera actuación en territorio español, fue la transición perfecta de un cartel muy bien hilado, aunque no lo pareciera a priori. La joven artista de ascendencia caribeña basó su repertorio en Messy su estreno en formato largo y que fulgurantemente la ha situado en el mapa sonoro de nuevas artistas neo-soul… aunque en el inicio de su actuación, se acercó al jazz distinguido, incluso con destellos bossanoveros en la canción que da nombre al disco, pero el soul templado y elegante es lo que encandiló a un público con más curiosos que conocedores, que cayeron rendidos ante su cercanía y naturalidad… de su voz, y cuando interpretaba al piano o la acústica. 
 
La actuación más esperada, llegó con la noche ocupando el recinto. Massive Attack ofrecieron un concierto conceptual más allá de lo musical, con una propuesta escénica en la que las proyecciones en la pantalla fueron constantes entre la experimentación y las imágenes de denuncia: la masacre palestina Gaza y la guerra de Ucrania, mensajes políticos y sociales globales: gobiernos autoritarios,  retroceso de libertades democráticas o el nuevo orden mundial y las relaciones EE.UU, Rusia, China… que a muchos les pareció excesivas y en el límite o traspasando lo teóricamente conspiratorio, aunque nunca está de más la protesta si la misma se acompañaban de datos y referencias que inciten a la reflexión . Para unos que se moja…
 
Massive Attack. Foto: @sergioalberts

En cuanto a lo musical, comen las canciones de Mezzanine  articularon un discurso sonoro embaucador en el que la electrónica orgánica y oscura se reviraba en sordos y progresivos sonidos industriales. Resonancias progresivas que se atenuaba bajo la penetrante voz de Liz Fraser en «Song to the Siren» la canción de Tim Buckley que versióno con su banda posterior a Cocteau Twin, This Mortal Coin. También emocionó ¡una vez más! en «Teardrop» mientras que en «Black Mill» atenuaba su intervención vocal al servicio de la introspectiva tensión instrumental que aporaban Del Naja y compañía. También conmovió la voz de Deborah Miller, más extrovertida especialmente en la esperada y penetrante «Unfinished Sympathy», y el veterano Horace Andy que puso el contrapunto con la suya especialmente en «Angel», en una noche que sorprendió con el «ROckWrok» de Ultravox sacudiendo a la muchedumbre brazos en alto, aunque dominó la introspección… y la reflexión.

13 septiembre 2024

LCD SOUNDSYSTEM - POSTAL SERVICE - DEATH CAB FOR CUTIE - THE KILLS (29-8-24) Kalorama - IFEMA Madrid. Publicado en la web Rock & Roll Army.

LCD Soundsystem. Foto: @sharonlopez

A media tarde con el sol justo enfrente del amplio escenario secundario The Kills sacudió a un público que se empezaba a hacer  notar en el extenso recinto, a base de machacones ritmos pregrabados y a la lacerante guitarra de Jamie Hince, mientras la cantante Alisson Mosshart se movía de un lado para otro, buscando la menor incidencia solar a la vez que se tapaba los ojos. No estaba viendo nada de lo que ocurría delante de ella, dijo, pero la tregua radiactiva permitió a la norteamericana manejarse con mayor soltura y el mismo carisma. 
 
Comenzaron mirando dos décadas atrás,  con ‘Kissy Kissy’ de su primer trabajo, aunque el repertorio giró principalmente en torno a su última referencia God Games, sin olvidarse de ‘Doing It To Death’ aparecida en la BSO de Titane, que sonó al final junto a la adictiva y feroz ‘Future Stars Slow’ otra vieja y adictiva muesca de su pasado, para ofrecer un genuino y bien recibido aluvión de postcontemporáneo y cibernético garage-rock. 
 
The Kills. Foto: @shaornlopez
 
Después en el confuso límite en el que la noche desplaza al día, Ben Gibbard se hizo dueño de la noche con su doble actuación, primero con Death Cab For Cutie que celebraba el vigésimo aniversario de Transatlanticist  que tocaron en el mismo orden con esa cadencia de guitarras  tan suya entre la nostalgia atemporal y el pop íntimo, solo interrumpido por el brío de ‘The Sound of Settling’ y los cambios de ritmo de ‘Tiny Vessels’ por un lado, y por la profunda trascendencia  “increscendo “ de la canción titular por el lado contrari…, momento álgido con el público,  respetuoso y en silencio, entregado a la magia que emanaba del escenario. La actuación no se apartó del guión previsto, como así debía de ser en esta señalada ocasión, ejecutada exquisitamente y reforzando un periodo de la banda que no ha perdido vigencia en directo.
 
Death Cab For Cutie. Foto:@Sergioalbert

El músico de Washington, tras cambios en el line-up y en el vestuario, volvió al rato con The Postal Service. Cambió el distinguido negro por el blanco nuclear y junto a Jenny Lewis y Jimmy Tamborello, más algunos músicos acompañándoles, repitió formato con el único disco publicado de esta puntual colaboración a tres bandas, Give Up que sonó también en el mismo orden. La magia se vistió en este caso de rítmica electrónica y muestrario vocal y coral, con la de Jenny aportando calidez a la de Ben, más atenuada que con su banda, salvo en la emocionante ‘We Will Become Silhouettes’. Mientras, Jimmy bicheaba entre los teclados y efectos que hicieron bailar al respetable con la inapelable y emblemática ‘Such A Great Heights’, y la divertida y juguetona ‘Brand New Colony’, con sorpresa final versionando el “Enjoy The Silence” de Depeche Mode. 
 
Postal Service. Foto@sharonlopez

Suena la voz en off de Lou Reed y aparecen, para cerrar la noche LCD Soundsystem. James Murphy al frente de un buen número de músicos ofreció un derroche de punk electrónico bailable y repetitivo que puso en movimiento al mucho público que llenaba cada vez en más número el escenario principal. Picoteó entre las referencias de su repertorio clásico, no faltaron la rebosante orgía instrumental de ‘Daft Punk Is Playing at My House”, el cálido thecno de “Dance Yrself Clean”, el tribalismo de ‘Home’ o la metálica elegancia de ‘All My friend’, sin olvidarse del presente más cercano con la sofisticada ‘Tonite’  además de recordar a Kraffwer, utilizando su ‘Radioactivity’ como intro de la colorida pirueta de ‘I Can’t Change’. en un arrebatador continuo y crudo entramado percutivo de apocalíptico final.

09 septiembre 2024

Dust my Broom. La historia de Elmor James & Robert Johnson - GONZALO DE LA TORRE PUIG (Milenio) Publicado en la web Ruta 66

A partir de las vidas de los conocidos como “
El Rey del Slide Guitar” y “El Rey de los Cantantes de Blues del Delta” y de la autoría de la canción del título, la obra aborda la historia del blues no solo como género musical e industria asociada a él, sino como  movimiento social y cultural generador del posterior despegue del rock. Lo hace el músico argentino profundizando en las conexiones entre ambos y sobre todo entre las de éstos y otros bluesman o personas cercanas, alejándose de las leyendas y basándole únicamente en certezas, en un consciente ejercicio de deconstrucción de mitos, explicando además cómo y por qué se fueron forjando los mismos. 
 
Desechando lo que por fuentes orales no contrastadas se da por cierto de forma interesada o distorsionada por el recuerdo. Desarma mitos sobre cruces de caminos y pactos con el diablo, mostrando datos y huyendo de la afirmación rotunda y la posibilidad oportunista. Exhaustivo, abre varias vías, sin cerrarlas sobre el origen del blues y sus primeras canciones, que no grabaciones -mejor datadas- y cuanto más profundiza, más anónimos músicos encuentra para explicar el momento en el que surgió dicha música que bebe de los espirituales cantos del Delta del Mississippi. Escrito como un ensayo, que lo es, pero con la narrativa de la novela.

08 septiembre 2024

Free Jazz. La música más negra del mundo - MARIANO PEYROU (Anagrama). Publicado en el nº 427 de la revista Ruta 66

 Más que un ensayo es una entretenida e instructiva narración, que cuenta de forma rigurosa, pero muy accesible los orígenes y desarrollo de este subgénero musical. En esta introducción al sonido libre del jazz consigue el ensayista y poeta bonaerense enganchar a la lectura, a pesar de que, sus 155 páginas no se estructuran en capítulos ¡van del tirón! pero la historia es tan fluida y didáctica que no impide que se siga con máximo interés, incluso para quienes se acerquen a esta música por primera vez, pues aparte del contenido, la obra tiene valor como artefacto puramente literario. Bien contextualizado, con fechas y obras comentadas y explicando en todo momento conceptos que pudieran ser ajenos a quien no esté iniciado, la lectura engancha entre varios hilos conductores que se van aproximando según diferentes hitos que tienen parada en la tradición cultural y musical africana y en el arte de vanguardia con el que coexistía en el pasado siglo, remarcando los contrastes entre conceptos como: tradicional y moderno, música culta y popular, mundo racional y sensorial o en definitiva el propio concepto de libertad,  no siempre relación directa al de improvisación. Incluye QR para reproducir las piezas comentadas, con  M. Davis, J. Coltrane y O. Coleman como principales protagonistas.

07 septiembre 2024

MDOU MOCTAR - Funeral For Justice (Matador/Popstock!. Publicado en el nº 427 de la revista Ruta 66

El músico tuareg, tras denunciar la situación que vive su tierra  -el Sahel africano- Afrique Victim (Matador 2021) y su continuación, tomas alternativas y en directo en los dos volúmenes del Niger Ep (Matador 2022), continúa mostrando con más rabia aún si cabe las injusticias  provocada por la herencia colonial. La situación más que cambiar, se agrava tras el golpe militar y la retirada diplomática francesa del país, aunque sus compañías siguen controlando la producción de minerales energéticos que unido a la mayor violencia terrorista imposibilita el regreso de la banda. Esto se traduce en un sonido más rabioso y frenético, en el que la guitarra del Hendrix del Desierto suena más virulenta y agresiva que la del malogrado descendiente cheroqui.
«Oh France» o la titular lo testimonian. Ritmos negroides en contundente trance «Takoba» o «Modern Salves», blues-rock afilado y chillón «Imouhar» que no rehúye el hard-punk «Tchinta» para sonar reforzados por los ancestrales sonidos tribales.

06 septiembre 2024

LAS NUBES - Tormentas Malsanas (Spinda). Publicado en el nº 427 de la revista Ruta 66

El dúo con base en Miami formado por Ale Campos, a la guitarra y voz y Emile Milgrim en la batería, no ha podido tener mejores padrinos. Vecinas de Iggy Pop a quien han acompañado como banda de apoyo en directo, fueron además fichadas por el sello de Thruiston Moore, con quien lanzaron un par de singles «Enredados» y «Drop In, Ya Freaks» que aquí aparecen en una nueva versión, en la que, como el resto domina el ruido de guitarras distorsionado entre capas de sonido, baterías rotundas y voces en segundo plano. The Breethers y Pixies están en el punto de mira, aunque también, y menos evidente las L7 cuando hacen punk rock en «Canse» o Babys in Toyland cuando tiran por un particular grunge  en «Woulbd be». Todo pasado por un velado tamiz donde la melodía se retuerce, pero no se oculta. No hay nada nuevo, pero hay más de lo que parece. Las canciones en inglés y castellano enganchan y sorprenden eso sí, en los diez minutazos de «Caricia» confesional sinfonía entre el dream-pop y el stoner.