El de New Jersey se presento por fin dos años más tarde de lo
programado y precedido por las actuaciones de Jesse Malin y Chris Farren
que en horario excesivamente temprano, el que esto escribe no pudo
presenciar. Directos por tanto para… en
principio escuchar las canciones de su última disco ‘Local honey’ como
así hacía suponer un inicio de concierto marcado por las intimas y
pausadas «Hard Feelings» y «Lonely For You Only», pero Brain enseguida
se olvidó de sus nuevas composiciones para adentrase en los dominios de
las emociones más intensas de sus discos ‘Sleepwalker’ y sobre todo de
‘Painkillers’ el primero a su nombre de su amplia discografía, que se
convirtió en el principal aporte de canciones al repertorio.
Así, tras divertida pero excesiva parrafada con el público contando
un poco su vida, Brain se arrancó hacía los terrenos del medio tiempo
enérgico con «Come Wander With Me» «Nobody Wins» y las canciones
titulares de sus respectivos discos. Bien arropado por su solvente banda
The Howling Weather, según avanzaba el concierto y sobre todo partir de
la versión de Tom Petty «Mary Jane’s Last Dance» la intensidad aumentó
hasta tocar la fibra de las emociones en el tramo final con «Lomg
Drives» y «Roosemary» acercándose por momentos a la energía melódica de
The Gaslight Anthem su añorada banda de juventud. Momentos estos en los
que puso al límite su voz para entregarse a la épica emocional con la
sensibilidad de «Etta James» y el arrebato final de «Smoke». De menos a
más… y en escasa hora y media, con ganas de mucho más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario