A Iñigo "Cabezafuego" le conocemos habitualmente como panderetista y teclista de Atom Rhumba, siendo pieza ya fundamental de la banda bilbaína, sobre todo en los directos, pero su carrera en el "undergorund" se remonta a bandas como los añorados Mermaid y su último y más reciente proyecto, Basque Country Pharaons. Infatigable vitalista, este pamplonés universal se lanza ahora con una nueva propuesta, Royal Canal.Pudimos escuchar casi en familia las canciones de su estreno "Sail with Lord Alembic" un disco apacible, sencillo en melodías, de tempos cambiantes y evocador, en definitiva un disco muy agradable que desafortunadamente ha pasado desapercibido (de momento) para crítica y público.
Iñigo, ya fuera con la guitarra como con el teclado, se movió en directo por los diferentes registros que salpican las canciones en estudio. Canciones antagónicas como "Yo se who killed mi padre" críptica y rasposa a lo Tom Waits, "Si quieres me tienes" alegato esperanzador entre lo naif, psicodélico y bailable a lo Fernando Alfaro, o "Brazilian shave" extraño funky de influencia "rhumbera" conviven sin problemas gracias a las atmosferas y espacios que él mismo se crea.
"Green country road" sonó rebosante de melodía, una muy buena composición que equilibró los momentos de intimidad tabernaria de "Samll histories from big beds" con los de estallido festivo "Inadians & cowboys" una canción de llegada rápida, un himno.
Conseguir cohexionar estas canciones parecía difícil, sobre todo por que Iñigo, un auténtico showman en escena parece, con sus comentarios y bromas entre canciones, no tomarse mucho en serio, de hecho la actuación fue un tanto irregular , pero cuando menos parecía estar pendiente de todo, mejores momentos consiguió. Sobre todo por las buenas y diferentes canciones.
Después tocaron los psicótico-ruidistas Ginferno, veterana banda del undergorund-chatarra madrileño. Guitarras purgadora-lascivas y destartalada batería disonante al servicio del caos. Presentaron nuevo disco, con la novedad de un cantante, el sueco Kim que sobre todo por sus formas le va que ni pintado a los clásicos Krater, El Nene y Ariman.
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