19 marzo 2012

THE SADIES (16-3-12) El Sol - Madrid

The Sadies, liderados por los espigados hermanos Good, se afianzan a base de sonadas actuaciones en nuestro país. No han pasado seis meses y ya están aquí otra vez, sin nuevo disco que presentar, se sobran con una discografía extensa de la que se centraron sobre todo en sus dos últimos discos "New Seasons" (2008) y "Darker Circles" (2010), con los que se han dado a conocer  por estas tierras.

La banda canadiense ofreció un variado muestrario de sonidos que iban del country rock más salvaje hasta el surf psicodélico, todo ello aderezado con dosis potentes de bluegras y folk, con el incendiario violín en manos de Dallas Good removiendo los cimientos de la sala en canciones como su clásico "Higher power". Se decantaron por el ruido y estuvieron aceleradísimos en las guitarras, y no ya solo en esos breves y trepidantes interludios instrumentales a los que nos tienen acostumbrados, sino en la mayor parte de las canciones que viraban hacia el final de las mismas en estallidos de guitarras afiladas y brutales.

También hubo momentos para las melodías psicodélicas y ambientadas al estilo Byrds, pero fueron más los momentos de trepidante rodeo country rockero a lo Flying Burrito Brother, improvisaban  en desenfrenados y ruidosos finales de canciones hasta el punto que Dallas se acercaba a su hermano Travis pareciendo decirle algo así como ¡¡¡ qué estas haciendo tío !!! sobre todo al final del concierto y en los bises donde se mezclaron una serie de versiones entrelazadas, entre otras "Baby please don't go" (blues original popularizado por los Them de Van Morrison) que hicieron que la gente se mostrara estupefacta ante el aluvión de rock que estaban soltando. Se desató la locura.

Hubo momentos antes en el que el espíritu de Elvis y The Sadows planearon por  la sala, el rockabilly se fundía con el surf  todo ello con las guitarras sonando potentes y garageras. Saltándose los estereotipos se marcaron también una buena dosis de rock duro pero con contrabajo, violines y guitarras de fino sonido eléctrico. Cálidos en ritmos de contrabajo y batería, sorprendieron por su crudeza y fuerza.

1 comentario:

Anónimo dijo...

esta gente son muy grandes, he tenido la suerte de verles en tres ciudades en esta gira y todos han sido conciertazos!