El que fuera líder a finales de los setenta de The Only Ones llevaba más de
veinte años desaparecido del mundo musical, en parte por el abuso de sustancias
extremadamente nocivas (las que todos estamos pensando). Hasta que hace un par
de años largos y tras un homenaje a su figura en tierras gallegas le dio por
salir del eterno letargo y sorprendió con un excelente disco "How the west
was won" que le llevó de nuevo al directo, aunque su salud no le permite
mucho ajetreo, uno de los señaladas actuaciones tuvo lugar hace año y medio en
el mismo escenario en que nos encontrábamos, en esta misma sala
El Sol prometía volver, así que...
...lo prometido es deuda, ¡ volvió ! Y lo hizo con la misma banda con la que
grabó su estreno en solitario y esta nueva entrega "Humanworld". La
familia siempre cerca, con sus hijos y sus parejas como apoyo también en
directo.
Apareció el del sur de Londres casi con la misma imagen que es su anterior
aparición, las sempiternas gafas oscuras y una figura frágil agarrada al mástil
de su guitarra rítmica, estático y poco hablador aunque cuando lo hacía, conseguía
hacernos reír con sus irónicas palabras. Ahora es su hijo Jamie quien lleva las
riendas de la guitarra principal con la misma energía con la que ya le habíamos
visto.
Abrieron a modo de introducción con una inesperada "Baby don't
talk" canción que Perret firmara con The Ones, la banda con la que intentó
renacer en los 90 y con la que editó un único disco Woke Up Sticky (1996) Para
continuar con seis canciones seguidas de su anterior disco, la primera la que
le da título "How the west was won" una esplendida melodía "velvetiana"
de aires fronterizos a la que siguieron las ya conocidas "An Epic Story”,
“Hard to say no”, “Troika”, “Sweet endeavour” y “Living in my head” tarareadas algunas
por un público que en buen número estuvo ya presente en su anterior actuación.
Después un par de clásicos de The Only One para adentrarse ya sin pausa en el
nuevo disco.
Los teclados de Laura Moon y efectos de voz de Jenny Maxwell, tuvieron más
presencia con las nuevas canciones... como en "Once is enough",
"48 crash" o en el inicio de "War plan red" aunque no
dejaran de sonar las guitarras en su versión distorsionada: "Master of
destruction" o afilada: "Love comes on silent feet" y esa
cadencia "Velvet" esencial en Perret.
En la bises, un par de vueltas más a The Only Ones donde no podía faltar la
coreadísima "Another girl, another planet" y "The
beast" un desarrollo en el que de nuevo se vislumbró a la
"Velvet" ...y de tanto citar a la banda de Reed, Cale, Morrison y
Tucker... para acabar, se marcaron un "What goes on" antológico que
no aparecía en el listado de canciones, donde si aparecía "I want your
dreams" la canción que abre el último disco y que habrá que esperar para
escuchar en directo. Porque esperemos que haya más ... ¡ por supuesto ¡ y que
la saga continúe... que el viejo Peter aun tiene mucho que decir.
Los jueves en directo de 21:00 a 22:30 a través de las ondas en Radio Utopía 107.3 FM y en la red en www.radioutopia.es
14 junio 2019
10 junio 2019
CÁCERES UNDERGROUND WEEKEND (8-6-19) ARIZONA BABY - BOURBON - LEONE - SALLY BROWN - Boogaloo y Mastropiero - Cáceres
La jornada del sábado comenzó por la tarde en la terraza del Mastrorpiero.
Puertas abiertas para pasar la tarde entre mercadillo, barbacoa y cervezas y siguiendo
con la apuesta del festival a abrirse a sonidos menos evidentes pero
tangenciales al rock, el turno fue par dos bandas madrileñas: Leone y su
particular fusión de de canción española, western, surf... y demás sonidos de
los arrabales y Sally Brown que apuestan por sonidos ska fusionado con sonidos
pop y nuevaoleros de los 80'
En tarde soleada (olvidado el aguacero del pasado año, por el que la organización decidió cambiar las fechas de mayo por junio) Leone que presentaron su último disco cuyas canciones interpretaron con maestría en el mejor amiente posible. Aunque con problemas en el amplificador de la guitarra sonaron a canción española en el "El presidiario" a western en Sed de mal" a rock castizo en "A tu vera" y a desierto y frontera en "La vida no vale nada" canción que da título al disco. Como no acordarse de la actuación en el mismo lugar de Pájaro en la pasada edición. Sonido arrabalero y castizo bien recibido perfecto para la ocasión.
Con la tarde ya declinando, Sally Brown, veterana banda que ha sufrido constantes cambios de formación, pero que sieguen en la brecha mostrando los sonidos del ska menos ortodoxo, los que popularizara el sello '2tones' en los ochenta y que dio nombre a todo un estilo que fusionaba la música jamaicana con la explosión pop y nueva ola británica, ritmos y melodías para el baile que los madrileños interpretaron sin prejuicio. Con su característico saxo, divirtieron a un público distendido y sin complejos.
La sesión de noche en Boogaloo nos trajo otra sorpresa, otra senda nueva por la que transitar por el festival. En este caso los sonidos psicodélicos y progresivos de Bourbon, otra de esas bandas ocultas, que desde Sanlúcar de Barrameda presentó su tercer disco 'Fuente Vieja ' que nos hizo viajar por los sonidos citados, aderezados por los tradicionales del rock andaluz de los 70. Sonaron melodías lisérgicas y floreadas en la canción que le da nombre al disco, tensas con tintes folk en "Si veis la luz corred" densas y con aires stoner en "El sendero"... e hipnóticas en "Destierro" un infinito desarrollo de guitarras bluseras que se fue transformando en una maraña de ruido psicótico que no parecía tener fin... como si de una improvisada jam se tratase.
Bajamos de la nube para cerrar con Arizona Baby, el plato fuerte del festival, aunque su propuesta es ya bien reconocida. Lo que llama la atención de los vallisoletanos es como consiguen generar un ritmo y energía tan endiablado con una eléctrica, una acústica y una batería... un barbudo power rustic trió al que si además le añadimos el carisma de Javier Vielba... cada actuación es una fiesta asegurada. Así fue una vez más y si en espacios reducidos como este, mejor que mejor. Repasaron los sonidos de la tradición norteamericana en canciones antiguas como "The truth", "Survive" o "If a could" donde predominaron los sonidos del blues y el boogie más fiestero, pero el repertorio se baso principalmente en su último disco 'Sonora' donde la gama de sonidos se amplía a los sonidos más bailables del bluesrock " Make belive", del power pop "Updownaroundgo" e incluso del tecnofolky festivo "Devilish man". Final por todo lo alto con "Shiralee" que un chavala pidió a gritos durante toda la noche y que al final fue concedía... no sin antes regalarnos Vielba los oídos y los suyos con otra retahíla de incontinencia verbal... contó cosas muy interesantes, pero a veces es excesivo y rompe el frenético ritmo de concierto... quizás para darse un respiro. Toda una fiesta en todo caso para finalizar otro fantástico fin de semana en tierras de la penillanura.
En tarde soleada (olvidado el aguacero del pasado año, por el que la organización decidió cambiar las fechas de mayo por junio) Leone que presentaron su último disco cuyas canciones interpretaron con maestría en el mejor amiente posible. Aunque con problemas en el amplificador de la guitarra sonaron a canción española en el "El presidiario" a western en Sed de mal" a rock castizo en "A tu vera" y a desierto y frontera en "La vida no vale nada" canción que da título al disco. Como no acordarse de la actuación en el mismo lugar de Pájaro en la pasada edición. Sonido arrabalero y castizo bien recibido perfecto para la ocasión.
Con la tarde ya declinando, Sally Brown, veterana banda que ha sufrido constantes cambios de formación, pero que sieguen en la brecha mostrando los sonidos del ska menos ortodoxo, los que popularizara el sello '2tones' en los ochenta y que dio nombre a todo un estilo que fusionaba la música jamaicana con la explosión pop y nueva ola británica, ritmos y melodías para el baile que los madrileños interpretaron sin prejuicio. Con su característico saxo, divirtieron a un público distendido y sin complejos.
La sesión de noche en Boogaloo nos trajo otra sorpresa, otra senda nueva por la que transitar por el festival. En este caso los sonidos psicodélicos y progresivos de Bourbon, otra de esas bandas ocultas, que desde Sanlúcar de Barrameda presentó su tercer disco 'Fuente Vieja ' que nos hizo viajar por los sonidos citados, aderezados por los tradicionales del rock andaluz de los 70. Sonaron melodías lisérgicas y floreadas en la canción que le da nombre al disco, tensas con tintes folk en "Si veis la luz corred" densas y con aires stoner en "El sendero"... e hipnóticas en "Destierro" un infinito desarrollo de guitarras bluseras que se fue transformando en una maraña de ruido psicótico que no parecía tener fin... como si de una improvisada jam se tratase.
Bajamos de la nube para cerrar con Arizona Baby, el plato fuerte del festival, aunque su propuesta es ya bien reconocida. Lo que llama la atención de los vallisoletanos es como consiguen generar un ritmo y energía tan endiablado con una eléctrica, una acústica y una batería... un barbudo power rustic trió al que si además le añadimos el carisma de Javier Vielba... cada actuación es una fiesta asegurada. Así fue una vez más y si en espacios reducidos como este, mejor que mejor. Repasaron los sonidos de la tradición norteamericana en canciones antiguas como "The truth", "Survive" o "If a could" donde predominaron los sonidos del blues y el boogie más fiestero, pero el repertorio se baso principalmente en su último disco 'Sonora' donde la gama de sonidos se amplía a los sonidos más bailables del bluesrock " Make belive", del power pop "Updownaroundgo" e incluso del tecnofolky festivo "Devilish man". Final por todo lo alto con "Shiralee" que un chavala pidió a gritos durante toda la noche y que al final fue concedía... no sin antes regalarnos Vielba los oídos y los suyos con otra retahíla de incontinencia verbal... contó cosas muy interesantes, pero a veces es excesivo y rompe el frenético ritmo de concierto... quizás para darse un respiro. Toda una fiesta en todo caso para finalizar otro fantástico fin de semana en tierras de la penillanura.
CÁCERES UNDERGROUND WEEKEND (7-6-19) AULLIDO ATÓMICO - LOS DEL TONOS - Boogaloo - Cáceres
Nueva edición de este pequeño festival que sigue apostando por las bandas
más novedosas o menos conocidas del panorama alternativo, aunque en esta
ocasión incluyen algunas propuestas más consolidadas... a una ciudad que
no está sobrada de directos, peo que poco a poco se va situando en el mapa
sonoro.
Los encargados de abrir la jornada del viernes noche fueron Aullido Atómico, trío valenciano con cierto recorrido ya. Han grabado tres discos y el último 'Decadencia' fue el protagonista de un repertorio que sorprendió por el desparpajo a la hora de interpretar unas canciones que fusionan rock primitivo y destartalado con punk ágil... y fresco, de un abanico... no de cristal que diría el gran Kiko Veneno, sino de referencias sonoras de los 80' más informales e irreverentes. Sobre el cochón de una sección rítmica básica, sin artificios, pero contundente, Don Rogelio se recreó con su guitarrista y puso voz a unas canciones muy personal.
Crítica inteligente y no exenta de humor ¡ por qué no! jugando con los dobles sentidos en "Fuego y semen" tiraron de nihilismo en "Coca cola Revolution" y de dadaísmo en "Estereotipia (Dedicada a Rómulo el rinoceronte del Zoo de Valencia). En "Imagen del extrarradio" nos contaron quiénes son y de dónde vienen y en "Bandolero" o "Sueño recurrente" se lucieron en los coros. Presentaron algunas canciones de su inminente nuevo disco, como las ácidas crónicas urbanas de la oscura "Valenciocracia" y la un tanto discotequera "El caldo nacional" para dejarnos una gran sonrisa en la boca.
La jornada doble del vienes la cerró Hendrik Röver con sus Deltonos. Veteranos supervivientes de la escena rockera, La banda dirigida por el cántabro parece apostar de nuevo por su banda de toda la vida... después de algunas andanzas en solitario y proyectos varios. Prolífico como nunca vino cargado de un buen montón de canciones a las que añadir las de su último disco “Fuego".
Sonaron sólidos y bien rodados, moviéndose por las diferentes sendas del blues rock potente, pero con un aporte melódico que no dejó de estar presente a lo largo de la noche... ese inconfundible sonido suyo tan particular que adornó los aires country de "Cazador" áridos de "Vergüenza", sureños de "Águila", ritmanbluseros de ""Correcto", hardbluseros de "Fuego" o souleros de "Doctor”, todas ellas del disco a estrenas. Rock por los cuatro costados sin olvidarse de viejos clásicos de blues bailables como "Listo" o "(Soy un) hombre enfermo" esta última sonando con mucho beat.
Noche de contrastes con dos propuestas, en principio diferentes... frescura y solidez y viceversa, pero no tan alejadas en esencia y que se complementaron para cerrar una atractiva y disfrutable noche.
Los encargados de abrir la jornada del viernes noche fueron Aullido Atómico, trío valenciano con cierto recorrido ya. Han grabado tres discos y el último 'Decadencia' fue el protagonista de un repertorio que sorprendió por el desparpajo a la hora de interpretar unas canciones que fusionan rock primitivo y destartalado con punk ágil... y fresco, de un abanico... no de cristal que diría el gran Kiko Veneno, sino de referencias sonoras de los 80' más informales e irreverentes. Sobre el cochón de una sección rítmica básica, sin artificios, pero contundente, Don Rogelio se recreó con su guitarrista y puso voz a unas canciones muy personal.
Crítica inteligente y no exenta de humor ¡ por qué no! jugando con los dobles sentidos en "Fuego y semen" tiraron de nihilismo en "Coca cola Revolution" y de dadaísmo en "Estereotipia (Dedicada a Rómulo el rinoceronte del Zoo de Valencia). En "Imagen del extrarradio" nos contaron quiénes son y de dónde vienen y en "Bandolero" o "Sueño recurrente" se lucieron en los coros. Presentaron algunas canciones de su inminente nuevo disco, como las ácidas crónicas urbanas de la oscura "Valenciocracia" y la un tanto discotequera "El caldo nacional" para dejarnos una gran sonrisa en la boca.
La jornada doble del vienes la cerró Hendrik Röver con sus Deltonos. Veteranos supervivientes de la escena rockera, La banda dirigida por el cántabro parece apostar de nuevo por su banda de toda la vida... después de algunas andanzas en solitario y proyectos varios. Prolífico como nunca vino cargado de un buen montón de canciones a las que añadir las de su último disco “Fuego".
Sonaron sólidos y bien rodados, moviéndose por las diferentes sendas del blues rock potente, pero con un aporte melódico que no dejó de estar presente a lo largo de la noche... ese inconfundible sonido suyo tan particular que adornó los aires country de "Cazador" áridos de "Vergüenza", sureños de "Águila", ritmanbluseros de ""Correcto", hardbluseros de "Fuego" o souleros de "Doctor”, todas ellas del disco a estrenas. Rock por los cuatro costados sin olvidarse de viejos clásicos de blues bailables como "Listo" o "(Soy un) hombre enfermo" esta última sonando con mucho beat.
Noche de contrastes con dos propuestas, en principio diferentes... frescura y solidez y viceversa, pero no tan alejadas en esencia y que se complementaron para cerrar una atractiva y disfrutable noche.
08 junio 2019
Discos mayo 19
These times – THE DREAM SYNDICATE
Crosswinds – XAVI
CALVET
Misfit– THE
LEGENDARY TIGERMAN
Man of many faces – PÁJARO SUNRISE
Lejos – TERCER SOL
Lowdown – DADDY
LONG LEGS
Los Estanques – LOS
ESTANQUES
The magic tree – STEVE FORBETT