Documental
que se ciñe a un periodo muy concreto que no cubre la extensa obra anterior y
posterior del artista nacido en Figueras. En los primeros minutos eso sí, se
muestra un necesario contexto social el de los movidos años 80’ en los que Kiko
Veneno ya de regreso de sus viajes hippie-iniciáticos por Europa y EE.UU se
asienta en la Sevilla previa a la Expo comenzando una carrera en el radical
amateurismo musical, no por nombres ya que se junta con Camarón y forma Veneno
con los hermanos Amador, sino por inexistencia en dicho años de una estructura
profesional adecuada.
Periodo
que cuenta con material audiovisual de los archivos de Televisión Española, no
en muy buen estado pero necesarios y suficientes para testimoniar los directos
vividos en dicho años… de fracaso comercial que le lleva a trabajar como
programador cultural de la Diputación de Sevilla. Hasta que decide jugárselo
todo a una carta, la de un disco que le permita
profesionalizarse o retirarle definitivamente de la música.
A
su llamada de auxilio acude el siempre inquieto y visionario Santiago Auseron,
en esos años aún en Radio Futura, que se convierte en su mentor y que le
propone grabar en Londres bajo la producción de Joe Dworniak con quien había
trabajado ya. A partir de aquí la historia es conocida y el documental se
centra en la fase de grabación con los protagonistas redescubriendo y
recordando un disco que sienten vigente.
Interesantes
como siempre las palabras de un Auserón preciso y en este caso curiosamente
histriónico. Divertidas y vehementes, pero no exentas por ellos de rigor las de
Andrés s Herrera “Pajáro” guitarrista junto a Lalo Ortega que aporta en sus
declaraciones un punto de serenidad y reflexión que complementa a igual que con
la guitarra lo dicho y tocado por Pájaro.
Honestas
declaraciones de Juán Ramón Caramés que se quedó fuera de las grabaciones en
Londres y como no las palabras de admiración y asombro del equipo británico en
la base rítmica y producción con muy destacables aportaciones del baterista
Frank Tontoh con ejemplos didácticos muy interesantes de cómo conseguían
contestar los ritmos de ambo de aquí y de allí… y que el futuro ‘Juan Perro’,
siempre atento, profundizó en su carrera en solitario.
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