El mito de Hendrix sigue siendo tema de interés, por lo que conmemorando el cuadragésimo aniversario de su muerte, se editó el pasado año en Italia esta biografía en comic que, ahora llega a nuestro país. Un obra estructurado en tres bloques: la niñez en Seattle y el camino hacia el éxito en Nueva York, el culmen artístico en Londes y la debacle personal de vuelta a los Estados Unidos.
Estos bloques a su vez se dividen en capítulos que toman el nombre de algunas de canciones, y así se va leyendo esta historia como si de un disco con sus diferentes cortes se tratara. En rigurosos blanco y negro y con buena parte de sus páginas al servicio del recreo visual sin palabras, ya sean escenas oníricas o del protagonista con su guitarra, la historia fluye con sencillez, de forma asutera incluso, equilibrando lo estrictamente documental con las licencias que aportan los autores.
Ni mucho menos es una biografía exhaustiva, al contrario, pesan más en esta obra las reglas del comic, por lo que la alegoría está presente en un buen número de páginas, por momentos no sabemos si la historia la cuenta un Hendrix que recuerda su vida desde la muerte, o este mismo protagonista mezcla realidades y sueños en un mundo de vivos en el que él, cpmo héroe en el mundo terrenal, va buscando el alma de la música en su guitarra y en el mundo celestial busca el alma de su propia existencia en la piedra que tiene que arrebatar al monstruo. Se hace por ellos más disfrutable para los lectores no iniciados en la obra de Hendrix que para los conocedores de su obra, en busca de respuestas a los enigmas sobre su vida.
El contexto en el que se movió su vida aparece, en este caso, de forma concisa y como elemento inherente a propia la historia. Si la niñez muestra la segregación racial con problemas familiares de fondo, su decadencia personal se emparenta con el asesinado de Luther King y el concierto de Altamont (joven negro asesinado por los miembros de seguridad del concierto The Hell Angels), entre medias, los días de gloria del movimiento hippy con los conciertos de Monterrey y Woodstock (este último como su canto del cisne personal).
Son muy interesantes además los interludios que relacionan los momentos más reflexivos de la vida de Hendrix que cobran vida a través de "2001 Una odisea en el espacio" de Stanley Kubrick y "Hamlet" de William Shakespeare. No faltan tampoco, aunque sin recrearse en exceso los elementos reconocibles de la cultura rock: drogas, "groupies", estrellas del rock (Eric Clapton en el periodo Cream o Pete Towshend en el auge de los Who como más significativos entre muchos otros), ni imprescindibles referencias, como la cultura del bluesman en constante "crossroad" o, ¡ como no ! el woodoo como principal referente de la cultura indígena y la negritud.
Excelente reseña. Veo que también has disfrutado con esta clase de lecturas (que como bien díces no tienen porqué ser biográficas cien por cien), el formato novela gráfica en blanco y negro le va de perlas a esta clase de historias. Supongo que conocerás "Jirafas en mi pelo: Una vida de rock'n'roll (también de La Cúpula), si no, estoy seguro que te gustará por el tema a tratar.
ResponderEliminarSaludos
Gracias por la recomendación. Buscaré "Jirafas en mi pelo" pues no lo conozco.
ResponderEliminarEn cuanto a este "Electric requeim" es más disfrutable ciertamente como comic (con sus caracteristicas) que como biografía (con las suyas).
Un saludo