La segunda jornada comienza ya en en el centro de Aranda, donde el escenario Bodegas se convierte en un punto de interés más, con actuaciones entre las 12:00 y las 15:00 en las que la congregación de aficionados dota a este espacio de entidad propia, con algunas actuaciones más celebradas incluso que otras de la noche y donde el fuerte calor y la estrechez del lugar no sólo no impidieron el disfrute del mismo, sino que fue, por esas mismas condiciones, un aliciente más para la fiesta
La primera sorpresa fue Fuel Fandango la nueva propuesta de Ale Acosta de Mojo Project junto a la cordobesa Nita, desaró al personal e hicieron vibrar a ritmo de una babel tanto de sonidos: electrónica flamenco, rock, funky...como de lenguas: inglés, español un no parar de ritmos y bailes. Acompañados de una batería consiguieron recrear un sonido orgánico que caló hondo. Nada que ver con la frialdad de su disco de estreno, aquí en directo es donde realmente se saborean.
Por la tarde, y ya en el recinto unos veteranos y a la vez clásicos del Festival Niños Mutantes. Se vió cómodos a los granadinos, ya han celebrado de sobra su 15º aniversrio juntos, por lo que actuaron despreocupados, actuando más para ellos que para el público y ahí estuvo su efectividad. Interpretaron las nuevas cancones más que tirar de grandes éxitos, aunque también los hubo y aun cuando la aplaudida "Como yo te amo" de Manuel Alejandro que popularizaran Raphael y Rocio Jurado, no dejó de ser vitoreada anécdota, fue en canciones de su último disco como "Las noches de insomnio" que le da nombre o la exceletna "Errante (canción mutante)" donde se muestran como son.
Con Nacho Vegas en la noche, la multitud empezó a copar los escenrios. Difícil hablar de su actuación pues en los Festivales el tiemo es limitado, y el gijonés no es de los de hora escasa ademas en esta web le hemos seguido bastane, por eso lo que sorprende a algunos, no lo hace a otros. Lo más destacable para un seguidor veterano y fiel, fue comprobar la versatilidad con que consigue condensar en escaso tiempo, lo que es su extensa obra, la más actual y accesible, de su disco "La Zona Sucia" en el que centro el repertorio de la actuación y del que se corearon como himnos "Cuando te canses de mi", "Reloj sin Manecillas", Taberneros", "Perpñlejidad" y ¡ como no ! "La gran broma final". Pero no se olvidó de donde viene y mostró a los neófitos con "Maldición" una de ess historias sucias,oscuras y embiragadoras que caracterizaron sus priemros discos de esos que califica la gente de "cortarse las venas". Tambén mostró sus influencias, conviertiendose "Miss Carrusel" en la sorpesa más inesperada de la noche. La adpatación de la original del pionero del folk norteamericano Townes Van Zandt es una gran esconocida para los muchos alllí reunidos y aun comentaba alguien si no sería alguna nueva canicón. Si a eso añadimos que "Dry Martini S.A." o "El hombre que casi conoció a Michi Panero" siguen consolidandose en directo como grandes canciones, no extraña que siga convocando nuevos adeptos en cada actuación. Para finalzr "El mercado de Sonora" donde inlcuso estalla el ruido y la distorsión.En constante reinvención, se mostró versatril y manejano sabiamente los moemtos y situaciones, hablando cuadno hay que hablar... e interpretando.
Otro momento esperado era la repaarición de Sexy Sadie, reunidos este años tras el trapiés sufrido por Jaime Garcïa Soriano en su esteno en solitario con Sr. Nadie. Concierto en que repasaron pare de las canciones que les han hecho clásicos, rescatando incluso "In the water" un auténtico himno generacional de los noventacon la que pudimos comprobar la evoulción de la banda desde sus inicios grungeros al elegant clsicismo pop de sus discos posteriores, como muestra "Brand new world" p "Someone like you".Se echó de menos Mr Nobody pero sorprendieron con la colaboración de Adela cantante de los desaprecidos Sunflowers y Sterlin que puso su voz a la muy sensorial "A scratch in my skin". También cayó una versión, en este caso la archiconocida "American girl" de Tom Petty que sonó incendiaria. Todos encantados y a ver si los volvmenos a ver.
Con Iván Ferrerio volvió la multitud. Tiene el vigués un público fiel que facilita las cosas tanto, pero hace que caiga en la autocomplacencia, acomodándose en exceso en discursos de gratitud y concediendo tiempo de más al karaoke de los africionados. Canciones como "Turnedo" o " Ciudadano X" no lo merecen y eso ocurrió... una pena.. En este constexto funcionaron mejor canciones como "El Viaje de Chihiro" o "N.Y.C" con las baterías potentes y las guitarras rebosando sonido. Auténtico éxito de público, pero realmente la actuación se hiz previsible y sin apenas riesgo. Le salvaron las canicones no la interpretación.
Multitud de actuaicones en la carpa pero... a pesar del interes por muchas de ellas, se hace difiícil no desistir...¿es posible una carpa con buen sonido o al menos aceptable?, ¿no será mejor escearios al aire libre aunque más pequeños? Un pena por que había buena programación pero en estas condiciones... inaudible.Aun así, picoteando a ratos destacar algunos momentos del rock seteentero de Fuzz, los ya veteranos Holywater con su power-rock guitarrero o The Noises y sus estribilos de rock de guitarras potentes.
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